Xalapa, Ver. La reconocida bailarina japonesa de danza Butoh, Natsu Nakajima, viajó a Xalapa para ofrecer un espectáculo dancístico en honor a la también bailarina y ceramista, Rocío Sagaón, en un homenaje que familiares y amigos le rindieron aun año de su muerte.
El pasado seis de julio colegas, amigos y familiares se reunieron para presenciar a Natsu Nakajima, quien bailó al sonido de un tren y de la música de Gustav Mahler. Su danza fue una adaptación especial al lugar en honor a Rocío y fragmentos de su última coreografía «like Smoke, like ashes«.
El espectáculo se desarrolló en el IZOTE, ubicado en la casa de Rocío Sahaón en Rancho Viejo, que ahora ha sido convertido en un Centro de Residencias para la Creación, Experimentación y Producción Artistica a cargo de Djahel Vinaver y Joaquín López «Chas» y cuyo espacio escénico se inauguró con la experimentada bailarina japonesa.
Natsu Nakajima, una de las principales bailarinas japonesas de danza Butoh en el mundo, fue invitada hace 30 años por Rocío Sagaón a visitar Xalapa e impartir talleres. Desde entonces Natsu continuó su relación de amistad y artística con la familia Vinaver y con el Mtro. Abraham Oceransky.
En este último viaje número 16 a México planeó bailar en honor a Rocío. Su «segunda madre«, ejemplo de vida.
«Quedamos profundamente conmovidos al verla bailar, además de que la presencia de Rocío nos abrazó de principio a fin», comentò Djahel Vinaver
Durante el pequeño homenaje el actor y cineasta Felipe Casanova deleitó al pequeño grupo de artistas, con el poema ‘Pido Silencio’ de Pablo Neruda.
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