Exdirector del ITESCO, Ricardo Orozco, sigue manejando el sindicato pese a que ya no trabaja ahí

Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos

Por Ignacio Carvajal/

Coatzacoalcos, Ver. Lo que ya era un secreto a voces, queda confirmado con documentación oficial. Que Ricardo Orozco Alor, ex director del Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos (Itesco), sigue operando en el sindicato de esa institución, a pesar de que ya no está en nómina y que sus agremiados se habían deslindado de él.

Los mismos documentos, entregados por la Secretaría del Trabajo y Previsión Social (STPS) del gobierno de Veracruz desnudan una trama de mentiras montada por la dirigente del SUTITESCO, Ana Isabel Hernández Jacobo, quien ha negado toda relación con Orozco Alor, ahora que el instituto es manejado por otra institución, y el otrora sindicato todo poderoso, quedó en segundo plano, desterrado del paraíso terrenal en donde los tuvo Flavino Ríos Alvarado, Javier Duarte de Ochoa y Fidel Herrera Beltrán.

En la información entregada por la STPS, al responder la solicitud de información 00948117, además, se evidencia que Hernández Jacobo ha surcado buena parte de su carrera como dirigente, mintiendo y manipulando a la clase trabajadora, a la que no ha dudado en esquilmarle sus cuotas, incluso sin tener derecho a ello.

En la solicitud citada arriba, se se requirió a la STYPS, la última actualización del padrón de socios del Sindicato Único de Trabajadores del Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos (SUTITESCO)

En respuesta, mediante el oficio STSP/193/2016, del 15 de agosto pasado, Joaquín Hernández Castillo, jefe del departamento de registro de asociaciones, indica que «el citado expediente a la fecha no cuenta con un padrón actualizado, ya que han realizado altas y bajas, pero no la actualización del padrón».

Además, «por lo que en cumplimiento a lo solicitado, se anexa copia del Padrón de Socios Presentado el dos de octubre de 2015 (constante de 10 fojas útiles), así como copia de la toma de nota de fecha 19 de septiembre de 2016, en la que se notificó las Altas y las Bajas solicitadas el 12 de septiembre del 2016 (constantes de dos fojas útiles).

Así, mientras la líder sindical Hernández Jacobo vocifera ante la comunidad académica y el alumnado que Orozco Alor ya no es parte del sindicato, legalmente, lo sigue siendo, expone en el documento citado, en donde se refiere, de su puño y letra, el movimiento de altas y bajas efectuado apenas el 19 de septiembre pasado, cuando

En lo referente a las bajas, se saca de la organización Ramírez Guerrero José Roberto, Landy Blanquet Escobar, Nataly Elena Ledezma Guzmán, Ana ISabel González Flores, entre otros, y se da de alta, en primer lugar, a CC. Ricardo Orozco Alor, Claudia Luz Domínguez Martínez, Hilario Ramos Alor, y otros más.

Con ese detalle, Orozco Alor, pese a no cobrar en el Itesco, sigue dentro de esa institución gremial impulsada por su grupo, y a la que llegó siendo apenas un maestro de medio pelo, y desde donde alcanzó la cumbre del poder, siendo candidato, director de Consorcio Clavijero y de Tránsito del Estado en el Duartismo.

Se indica que los socios dados de alta, suman treinta y ocho, aunque en los movimientos, protestas y declaraciones que ha dado la líder, siempre expone que son  más los integrantes, que ahora entró en crisis por el arribo del nuevo organismo gremial denominado Sindicato Independiente de Trabajadores del Instituto Tecnológico Superior de Coatzacoalcos, el autorizado el pasado once de agosto.

Nuevo sindicado.

El nuevo sindicato es encabezado por las académicas Zofía Benítez Alonso y Jazmín Ruiz Bonilla, lo que ya  ha generado inquietud al interior del organismo encabezado por Hernández Jacobo.

Desde que se perdieron las elecciones a Gobernador, el año pasado, y al arrancar la nueva administración, los integrantes del sindicato de Hernández Jacobo realizan protestas paulatinamente por cualquier tema, y acusan abusos y atropellos.

El último tema en boga, es la asignación de las cargas laborales para académicos, que ellos acusan son antipedagógicas y les resultan un abuso de la nueva directiva, encabezada por María Inés Núñez.

Sin embargo, como se ha venido documentando, el grupo sindical ha perdido espacios y poder de operación al interior del instituto, donde se hicieron notorios públicamente por la organización de rifas, cuyos boletos, obligadamente, debían vender alumnos y maestros; por el apoyo a candidatos del PRI y el acoso del que se hacían blanco quienes no acataban las ordenanzas de Orozco por medio de su vocera, Ana Isabel Hernández Jacobo.

Negocios con el centro de cómputo, las copias, la venta de comida, las máquinas de despachar refrescos y golosinas, y las cuotas cobradas, casi como derecho de piso, a los vendedores de dulces y hojaldres.

En su historial, Orozco Alor creó toda una red de operación electoral en distintas dependencias, como Tránsito del Estado, Consorcio Clavijero, la Universidad Popular Autónoma de Veracruz, el IVEA y la CAEV de Minatitlán, encaminada a operar electoral mente para los candidatos del PRI y para él mismo.

En febrero pasado, Liberal del Sur documentó que el Sutitesco se embolsaba 100 mil pesos anuales por la operación de las máquinas dispensadoras de golosinas distribuidas en el instituto.

Son 10 máquinas están instaladas en los distintos edificios del Itesco, todas están vinculadas al ex director del consorcio Clavijero, aunque es la secretaria de su sindicato, la que cobra los jugosos recursos aportados por los proveedores de pan, galletas, refrescos, etc., que también se llevan sus ganancias comerciando a alumnos y maestros.

Y por estos negocios, se indica, el sindicato no paga ni un centavo por el uso del suelo, menos la electricidad que usan las máquinas conectadas a la corriente eléctrica.

Menos, mucho menos, pagan alguna aportación simbólica para el mantenimiento de las instalaciones.  Todo es para las arcas de la dirigente sindical, que le reporta en corto a Orozco Alor.

Actualmente se desarrolla una auditoria completa que apunta a investigar la forma en que Orozco Alor repartió diversos a personas cercana a él,como Teresa Argüelles Rosaldo, quien premió con contratos jugosos para la elaboración de uniformes del Itesco, mismo que los alumnos le debían comprar.

En la entrega de mañana se dará cuenta la forma en que la líder Ana Isabel Hernández ha timado a sus compañeros de gremio con el cobro de cuotas, las que retenía pese a que a varios de ellos no los tenía dados de alta en la Secretaría del Trabajo como socios del sindicato.

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