Crisis por incompetencia

Es mucho honor ser el primer lugar en Corrupción en América Latina, según de acuerdo con el Barómetro Global de la Corrupción y de acuerdo con el índice anual de la Organización Transparencia Internacional (Forbes) México se ubicó en el lugar número 103 de un total de 175 países analizados en todo el mundo, en el Índice de Percepción de la Corrupción, debido a la posición de estancamiento en la que se ha mantenido por casi una década.

Medición bien merecida, en estos seis sexenios de presidentes neoliberales.

Por eso, es significativo que hoy en día,  no hay procurador General de la República, tampoco se haya aprobado la Ley Orgánica de la Fiscalía General, ni mucho menos se les ocurra en designar un Fiscal anticorrupción, pero ni de broma  exista la posibilidad de nombrar a los magistrados administrativos especializados en anticorrupción, ni tengamos Fiscal para delitos electorales, ni mucho menos a los encargados de perseguir y sancionar la corrupción. La corrupción protegida inmaculadamente por la impunidad y sobre todo la incapacidad de gobernar. Que chulada de país.

El Itamita, por eso del ITAM, neoliberal por excelencia, José Antonio Meade,  dijo “Es mucho lo que México le debe al PRI” y además aseguró que “no ha habido un sólo paquete económico en la historia moderna del país que no haya contado con el PRI,   quién ha  estado listo en prestar su apoyo y solidaridad», claro se le deben los más de 64 millones de pobres, los 10 billones de pesos de deuda pública, el raquítico crecimiento económico, de menos del dos por ciento en treinta y cinco años de neoliberalismo, la entrega del petróleo, la corriente eléctrica, las costas y playas, los millones de hectáreas destinadas a la explotación minera, la importación de alimentos, así  como, en diez años,   los  de doscientos cuarenta  mil asesinados, además de los embolsados, cercenados, pulverizados, en calles y cajuelas de automóviles, los  cientos de fosas clandestinas, las miles de jovencitas asesinadas,  violadas, prostituidas, los miles de niños desmembrados para el tráfico de  órganos,  la colusión, expansión y multiplicación del crimen organizado,  el sometimiento con los medios de comunicación y sobre todo el empobrecimiento de la educación pública, la destrucción del sistema nacional de salud, y el deterioro patético de la alimentación del mexicano.

Ese es el México que quieren que no  regrese  al  pasado. Peña Neto, Meade,  el PRI, Claudio X González padre, legisladores y empresarios,  se aferran  a un futuro promisorio, de inseguridad, violencia, desempleo, fracaso económico. Un modelo que mantenga el  PIB menor al 2% anual, como  en los últimos 35 años,  ya que es cosa del pasado alcanzar tasas mayores al 6% del PIB,  como sucedió en las décadas de  los 50-80. Se tapan, escandalizados,  ojos, oídos y boca, como simios asustados de la amenaza del  pasado ominoso  que impida  la continuidad de la entrega de los recursos nacionales a los grandes intereses trasnacionales. Una explicación serían los moches, otra perder la oportunidad que los contraten como empleados, otra que sus nietos, bisnietos, tataranietos no pierdan la oportunidad de vivir en la holganza, a costa de la destrucción del país.

FEPADE AL CADALSO

Santiago Nieto Castillo dirigió una carta al presidente del Senado, Ernesto Cordero, para notificarle su decisión de no impugnar su remoción como titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de los Delitos Electorales. Lo que nos recuerda, al ya clásico: copelas o cuello, no cabe duda.

Amenazas: destierro, cárcel o muerte, a cambio de un  futuro promisorio, una posición estratégica para  el 2018  o de plano una  vida tranquila.

Reacciones: Enrique Galván Ochoa‏: “Santiago Nieto Ibas a ser el primer fiscal independiente de la historia. ¿De cuánto fue el cañonazo apá?”

Julio Hernández López: ”¿quien doblego al fiscal Santiago Nieto?” a costa de qué?

Rafael Barajas: El cinismo de nuestros políticos convierte los asuntos en materia penal en asuntos en materia fecal. México, paraíso de los sobornos.

John Ackerman:  “Cuando un amigo del presidente de la República puede mandar a despedir al fiscal que lo investiga, queda perfectamente claro para quienes trabajan las autoridades. …. Ya basta del doble rasero. En México, las instituciones no procuran justicia sino impunidad.  Nuestro gobierno no sirve al interés   público, sino que defiende intereses privados y particulares

ALTERNATIVA INMEJORABLE

Sin embargo, la realidad  la expresó la diputada por Morena,  Rocío Nahle, al pedir  la renuncia de EPN por Odebrecht. No sólo Peña Nieto tuvo vínculos con Odebrecht, sino también su antecesor, Felipe Calderón  y muchos más gobernadores, alcaldes, empresarios, sindicatos.

En las últimas tres décadas,  presidentes latinoamericanos han sido sometidos a juicio político acusados de corrupción o mal desempeño de sus funciones, y  fueron obligados a dejar el cargo: Fernando Collor de Mello (Brasil, 1992), Carlos Andrés Pérez (Venezuela, 1993), Ernesto Samper (Colombia, 1995), Alberto Fujimori, (Perú, 2009), Fernando Lugo (Paraguay, 2012), Otto Pérez Molina (Guatemala, 2015), pero lo más curioso y oportuno, es que al caso de Abdalá Bucaram (Ecuador, 1997) fue “Destituido por loco como presidente de Ecuador”.

Los peores presidentes de México: Gustavo Díaz Ordaz, represor por excelencia, Vicente Fox, mandilón, mentiroso y corrupto, Felipe Calderón por su pasión etílica y su necedad  de declarar  la  guerra contra el narcotráfico, Enrique Peña Nieto por sus lagunas mentales en geografía política, economía familiar, literatura, dominio toluqueño del   inglés, y  el  millón de pesos diarios que gasta en propaganda, con el propósito de salir del sótano de la reprobación popular.

Según los expertos, la   figura   jurídica por excelencia se concentra en el proceso de interdicción por demencia,  que es el estado jurídico en que se encuentra una persona adulta que ha sido declarada legalmente demente por un juez. Las evidencias de un estado anormal son todas las “jaladas”, disparates, e   inconsistencias   que lo han llevado a alcanzar menos de 5 por ciento de aceptación nacional.

La renuncia es un caso que en nuestro país jamás se ha visto, ni antes o después, desde la Colonia, Independencia, Reforma o Revolución. La renuncia jamás será voluntaria, ni mucho menos “institucional”.

La destitución, por loco,   de Barukam, en Ecuador,  puede ser la mejor opción para el México que se aferra al futuro dependiente, corrupto y entreguista.

En el proceso del 2018 se pondrán en juego todas las artimañas, mañoserías, trampas, calumnias, traiciones, acumuladas desde 1988, mejoradas en el 2006 y perfeccionadas en el 2012, mismas  que fueron puestas en escena en el 2017 del Estado de México. O renuncia o se le declara demente. Es ahora o nunca.