Xalapa, Ver.- La violación constante a los derechos humanos de deportistas, dirigentes y padres de familia, es el sello característico de la actual administración en el Instituto Veracruzano del Deporte, donde la señora Ángeles Ortiz, mitad victima de su ignorancia y el resto quizá de una conducta tendenciosa, es la máxima exponente.
Seguramente pronto algunas de las muchas consecuencias de su deshonesta y arbitrario comportamiento aparecerán y operarán, sumando otro punto más, en contra de la imagen gubernamental de Veracruz; el Presidente de la Asociación de Atletismo, Israel Francisco Benítez, le tiene un guardadito como consecuencia del desacato en que ha incurrido la señora Ortiz, al incumplir con una resolución del máximo Tribunal Deportivo del país, por lo cual ha promovido un llamado incidente de inejecución.
Todo esto entre muchas otras cosas que le han sido reprobadas a la señora Ortiz Hernández, que lo mismo abandona a los deportistas veracruzanos a su suerte en tierras como San Luis Potosí, que les niega el derecho al deporte y a la recreación, bajo su equivoca concepción del deporte federado, como ocurrió precisamente en fechas recientes con atletas bajo la tutela del propio Israel, lo que incluso ha provocado que los padres hayan solicitado la intervención del organismo que preside Namiko Matsumoto, o sea, la Comisión Estatal de Derechos Humanos, pero también el propio pleno de la Conade, a la cual la Señora Ortiz Hernández, presume dirigirá en la próxima administración gubernamental (¿?).
Los estadistas visionarios, cuando ponen en práctica sus amplios conocimientos de la política y de las experiencias de la vida en sí, no dudan en enmendar la mala decisión en la designación de muchos de sus colaboradores.
La presencia de Ángeles Ortiz en la supuesta dirigencia del Deporte Veracruzano, irremediablemente remite a sus antecedentes como son las ligaduras con personajes del pasado reciente que en su momento afectaron a Veracruz.
Ortiz Hernández, originaria de Comalcalco, Tabasco, fiel a sus raíces, se ha aprovechado de los veracruzanos en su muy particular forma de interpretar lo que es un cambio para mejorar, pues si existen beneficios en el presente, estos solo han sido para su familia, su ser querido y desde luego ella misma.
La señora Ortiz Hernández, no solo ha sido Juez y parte al frente del Instituto Veracruzano del Deporte, donde para poder acceder a ser recibido por dicha persona, se debe contar con el visto bueno de colaboradores de su confianza que al igual que muchos de los que cobran en el Instituto, tienen pésimos antecedentes y desde luego, en realidad se han creído el cuento de que son los rectores del deporte veracruzano.
El no tratar ni atender con los deportistas y sus dirigentes, así como la prensa critica, sería lo de menos, aunque intrínsecamente desde luego que su conducta rompe con los parámetros de su obligación a otorgar información a los veracruzanos, lo que significa desde luego, vulneración a un derecho humano.
Pero cuidado, la Señora ha impedido, en contubernio con el procesado Antonio Lozano, quien se ostenta todavía como Presidente del atletismo federado en México, la intervención de niños y jóvenes en el evento, que cada día viene a menos gracias a ella, denominado Olimpiada Juvenil.
Padres de familia de los menores, han instaurado junto con el verdadero presidente de la Asociación de Atletismo de Veracruz, Israel Francisco Benítez Morteo, tramites que de cumplirse conforme a la Ley, le podrían traer graves consecuencias a la pseudo dirigente Ortiz Hernández.
Aunque sabiendo que cuenta con todo el respaldo gubernamental Estatal, la señora constantemente envía a los inconformes y detractores de su negativa labor, al lugar que tiene como nombre el rancho de su paisano Andrés Manuel López Obrador.
La historia de los frustrados atletas tiene como base que por instrucciones de Antonio Lozano, a quien este sujeto reconoce como responsable del atletismo en Veracruz, lo es la cubana Liliana Allen y no Israel Benitez. Lozano, como señalamos, le dio instrucciones a Ortiz Hernández de darle apoyo y avalar a la vez, a los atletas afiliados a la ilegal asociación que encabeza la paisana de su queridísimo Noslen.
El premio para la señora Ortiz Hernández, ya en su calidad de atleta paralímpica, fue el aval para que la tabasqueña pudiera acudir al mundial del Dubai, debidamente acompañada por su ser querido.
En el camino, quedó también el antecedente del pésimo manejo en el proceso de Olimpiada Juvenil del Beisbol, donde el punto negro lo fue el pase a la siguiente ronda que su enlace en la capital del Estado, Antonio Pérez, pese a la violación a la convocatoria tanto nacional como a la especifica del deporte de la pelota caliente, presentó la novena de la Liga afiliada a la asociación veracruzana de beisbol, vulneración que impugnó la representación de Coatepec, pero que en otro caso de influyentismo y ausencia de la imparcialidad que debía privar, se provocó con la decisión de Antonio Pérez, el enlace referido, que curiosamente debió abstenerse de ser Juez, cuando era parte en este caso, pues él es el presidente de la asociación veracruzana de beisbol.
Aquí, al igual que en el atletismo, Ángeles Ortiz Hernández, ha actuado con verdadera impunidad y en franca violación de los derechos humanos de los deportistas, niños y jóvenes que se creen el cuento al igual que sus padres, así como algunos maestros idealistas, de que forzosamente deben intervenir en las promociones del Instituto, para poder contar con apoyos. La señora Ortiz Hernández y su grupo, debe saberse solo apoyan a quienes le rinden pleitesía a la tabasqueña, pues conocemos ya se preparan viajes al extranjero incluso, que no son de competencias oficiales sino simplemente de invitación con los que la dama buscará la fotografía y tratará de darle una maquillada a su pobre labor.
Entre otras de sus hazañas, por así llamarlas, ha convertido a sus llamados enlaces en vendedores de afiliaciones, que les significan un porcentaje a la señora por cada credencial que vendan, desde luego que como operadora política, es un fracaso, pero en fin, lo dijimos al inicio es de sabios reconocer errores; pero más lo es el enmendarlos y un gran error ha sido la llegada de Ortiz Hernández a la dizque rectoría del deporte jarocho.
Por lo demás, esperemos conocer que tanto le aguantan los presidentes municipales, el haber convertido a los directores de los Comudes, los Comités Municipales del Deporte, en sus empleados, con los que hace y deshace a su conveniencia
Mientras tanto, seguramente sus jilgueros a sueldo seguirán ensalzando su labor y calificando de come tortas y refresqueros, a los compañeros del gremio que dan a conocer los atropellos de la tabasqueña.
Por cierto aquí habría que anotar el mal trato y discriminación de que ha hecho objeto a profesionales de la comunicación como Felipe García, Rocío Gotoo y últimamente a Miguel Ángel Gómez Scagno, por mencionar algunos pues aun hay más víctimas de la climatérica dama.
EL PRINCIPIO DEL FIN
Aunque fueron unos cuantos, la mañana del pasado martes, en rueda de prensa casi banquetera, algunos dirigentes deportivos y entrenadores, externaron molestias por la ausencia de apoyo y física de la señora Ortiz Hernández, a quien justificadamente calificaban ya de Juez y parte; no cabe duda, que esta señora poco a poco lleva al despeñadero a lo que queda del deporte jarocho
Comentarios