CIUDAD DE MÉXICO (apro).- El representante del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH), Jan Jarab, alertó sobre el incremento de crímenes de odio por homofobia en Veracruz, y urgió a las autoridades a tomar medidas para detener la violencia contra la comunidad LGBTI.
La preocupación de Jarab deriva de los recientes crímenes de Alaska Contreras Ponce y Elián Alexis, con lo que suman 17 personas de la comunidad LGBTI asesinadas en lo que va del año en la entidad gobernada por Miguel Ángel Yunes.
Luego de hacer un llamado a las autoridades para que “ninguno de estos casos quede en la impunidad”, el representante de ONU-DH instó a “tomar todas las medidas necesarias para contrarrestar las actitudes homofóbicas y transfóbicas y promover el respeto hacia la población LGBTI”.
“Observamos con preocupación el incremento de discursos y acciones que constituyen una amenaza a los derechos de la población LGBTI”, señaló el representante de ONU-DH, y agregó que los contextos en los que estas narrativas toman fuerza “permiten la existencia de crímenes de odio como los que se han materializado en el estado de Veracruz”.
Jarab recordó que el Estado mexicano tiene “la responsabilidad de adoptar medidas para prevenir los asesinatos motivados por el odio, las agresiones violentas y la tortura, así como de investigar estos delitos rápida y diligentemente con el fin de llevar a los responsables ante la justicia”.
La igualdad y la no discriminación, añadió, son principios básicos de las normas internacionales de derechos humanos, y uno es “ser protegido contra la discriminación por diversos motivos, entre ellos la orientación sexual y la identidad de género”.
La representación de ONU-DH se solidarizó con las familias de las víctimas y ofreció proporcionar “la cooperación técnica a las autoridades del estado de Veracruz, que ayude a superar este fenómeno”.
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