La política exterior, es la encargada de los vínculos políticos, económicos y culturales entre de las naciones del mundo. México que surgió como nación independiente en  1821; desde el primer momento construyó, sus propias redes para establecer vínculos diplomáticos con el mundo. Los Estados Unidos de Norteamérica, Francia, Inglaterra y Alemania fueron las primeras naciones en reconocer a México.

A los gobernantes de nuestro país tuvieron especial interés de recibir los reconocimientos políticos del Reino de España y Roma; mismos que tardaron, hasta el año de 1836.  Cuando la reina Isabel II de España, y él Papa Gregorio XVI, que reconocieron al Gobierno de la República, con su respectivo intercambio de embajadores plenipotenciarios. Roma, tardó en reconocer a México, por la sencilla razón con España de tener firmado el Regio Patronato desde finales del siglo XV.

Ha sido una tradición que las relaciones diplomáticas sean manejadas por el ejecutivo federal y el Senado de la República, el primero propone a los embajadores en sus diferentes modalidades, el Senado sólo rectifica. En el siglo XIX hasta hoy el Presidente de la República tiene la facultad de nombrar a los embajadores y Cónsules General, con regla clásica de la política, se designan a amigos personales, políticos del mismo partido, políticos incómodos la máxima de cuchillo o exilio, en alguna embajada, mucho dependen de la incomodidad del político, se busca en el mapamundi lo lejano o cercano de la misión diplomática a donde se va enviar al candidato.

El siglo XX mexicano, se inicia con la dictadura del General Porfirio Díaz, durante sus 34 años de presidente de México, logró diseñar todo una política exterior para promocionar al país, se aperturaron, un número importante de misiones diplomáticas por el mundo. El mejor ejemplo del reconocimiento que tenía en el mundo, fueron las numerosas de delegaciones diplomáticas que asistieron a los festejos del primer centenario del inicio de la de Independencia, en septiembre de 1910.

Con el Presidente Venustiano Carranza, se inicia propiamente la diplomacia de la Revolución Mexicana, con su ministro de relaciones exteriores, el veracruzano y ex Gobernador de Veracruz,  Cándido Aguilar «El nunca un desleal» tuvieron que declararse neutrales en el conflicto de la primera guerras mundial 1914-1919, así como el conflicto provocado por Pancho Villa, con la invasión militar a Columbus en marzo de 1916.

La política exterior mexicana del siglo XX, tuvo grandes representantes tales como Isidro Fabela, Genero Estrada, Francisco Cuevas Casino, Alfonso García Robles, Jorge Castañeda Flores, Rosario Green. La doctrina Estrada, muchos años rigió la política exterior mexicana,» la no intervención en los asuntos internos » hasta incorporada a rango constitucional durante la administración del presidente  Miguel de la Madrid Hurtado.  Una de  las épocas doradas del servicio exterior mexicano fue durante la presidencia del General Lázaro Cárdenas del Río,  1934 a 1940; abriendo las puertas del país al creador del Ejército Rojo, Lev Trotsky,  y al exilio español de la derrotada República Española, así como la crisis  internacional de la expropiación petrolera, y el inicio de la Segunda Guerra Mundial, en septiembre de 1939 ; donde México tuvo una participación durante el gobierno del Presidente Manuel Ávila Camacho. Otro de los momentos de gloria de nuestra política exterior la encabezó el presidente Adolfo López Mateos,  ante la Revolución Cubana, el gobierno de la república se mantuvo firme con la joven revolución; ha sido muy penoso que Mexico haya perdido su liderazgo con Cuba, vínculos que nos unen desde el periodo colonial, y que los últimos 25 años, la política exterior hacia Cuba no existe.

El siglo XX, la política exterior mexicano se profesionalizó, creando el Instituto de Relaciones Exteriores Matías Romero,  sin dejar de mencionar a la carrera de leyes de la Universidad Nacional Autónoma de México, de donde ha egresado el mayor número de nuestros diplomáticos, y así también las universidades privadas. Es muy grande la lista de todos los mexicanos que han sido designados miembros del servicios exterior mexicano, como intelectuales, escritores, políticos. Los gobiernos del Partidos Revolucionario Institucional, también utilizó al Servicio Exterior Mexicano, para enviar a los políticos incómodos, recuerdo el caso de Juan José Bremer, director de Instituto Nacional de Bellas Artes, quien le negó a la Sra. Carmen Romero de López Portillo, un piano, el castigo fue enviarlo como embajador de México en la antigua Unión de Repúblicas Socialistas Soviética.   El embajador Juan José  Bremer dicho castigo político ha hecho carrera en el servicio exterior como embajador de México, en Alemania, en España nuevamente tuve la fortuna de tratarlo, como integrante de la representación del Partido Acción Nacional en Europa. Los gobiernos de Acción Nacional, lo designaron como embajador en Inglaterra y Estados Unidos, Cuba.

Ex presidentes de México, ha sido nombrados  embajadores, Emilio Porte Gil, junto con Octavio Paz abrieron la embajada de México en la India en 1951. Gustavo Díaz Ordaz, reanudar los vínculos diplomáticos con el reino de España en 1977, y repudiado por los acontecimientos del dos de octubre de 1968; que obligó al embajador Octavio Paz, a renunciar al cargo en la India.

De los Veracruzanos dignos representantes diplomáticos, recuerdo al General Heriberto Jara Corona, de los primeros embajadores mexicanos en la Habana,  Manuel  Maples Arce, el General Adalberto Tejeda Olivares, dos veces gobernador de Veracruz, el gobierno de la República lo envió como su embajador en España, Francia, Perú; el ex gobernador de Veracruz, ante se serlo, Miguel Alemán Velasco,  el salinato lo designó embajador especial del Gobierno de México. Mi primer jefe laboral, el cordobés  Carlos Zapata Vela,  embajador de México en la URSS, amigo personal del presidente Gustavo Díaz Ordaz;  luego de su encargo coordinó los diferentes instituto de intercambio cultural México-URSS, en el país; en Xalapa se fundó en mayo de 1982. Dante Delgado, fue embajador en Italia, y  a su regreso fue preso, por venganzas presidenciales

Carlos Fuentes,  gloria de las letras nacionales, también tuvo responsabilidades en el servicio exterior mexicano, cabe señalar que su padre, el xalapeño  Rafael Fuentes,  también su embajador de México.

Mis maestros don José Iturralde Souza, consultor presidencial, fue enviado como embajador de México y Francisco Cuevas Cansino, diplomático de intachable trayectoria  en el servicio exterior, el único mexicano firmante de la Carta de los Derechos Humanos, el 10 de diciembre de 1948, y que el Gobierno de la República le adeuda un reconocimiento a sus trayectoria tan ejemplar, fue un amigo y compañero en el Instituto de educación  superior Simón Bolívar de Xalapa.

La política exterior de los gobiernos de Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón, durante doce años, fue de desaciertos, si bien en el primer sexenio panista, con la presencia de Jorge Castañeda, hijo del ex canciller con  Josè López Portilla, no garantizo esplendor, el famoso comes y te vas  al Presidente Cubano  Fidel Castro Ruz, se perdió el liderazgo mexicano con las demás naciones latinoamericanas, Felipe Calderón tampoco hubo luces. El panismo siguió los mismos pasos de los gobiernos priístas en designar a los amigos del presidente en turno y distinguidos militantes de acción nacional, sin importar ningún perfil. El caso de mi amigo y líder políticos César Leal Angulo, enviado como embajador ante el Gobierno de Grecia, lo avalaba un exquisito conocimiento del mundo grecolatino antiguo.

En los primeros días del mes de octubre Fidel Herrera Beltrán, fue designado como cónsul de México en la comunidad autónoma de Cataluña del reino de España, luego de varios intentos del presidente Enrique Peña Nieto de exiliar  al jefe del pinche poder Veracruzano, se filtró la intención de enviarlo con rango de embajador a Brasil, Argentina, Grecia, y hubo voces valientes en el Senado de la República, que evitaron que se metieran las propuestas, por lo impresentable del personaje siniestro. Por esos hubo que violentar todo el marco legal para exiliarse, con el rango de Cónsul a secas, el legal es Cónsul General avalado por Senado. El Mtro. Herrera Beltrán  arribó justamente el crisis que vive Cataluña con Madrid, por la Independencia; pero en Cataluña como en México hay protestas por la designación del ex gobernador  de VeracruZ, la prensa ibérica como la local no lo bajan como el narco cónsul, vinculado al crimen organizado del  país.

El Gobierno de la  República, cuenta con una gran reserva  de presos vinculados al crimen organizado, reserva que bien podría ocupar para emplearlos en las plazas del servicios exterior mexicana, ya como embajadores, cónsules, agregados culturales, comerciales, ya sin necesidad de pasar por los protocolos del Senado de la República, se imagina a usted al Chapo Guzmán, como embajador de México en el Reino Unido o Francia, para mejorar el túnel que nueva dichas naciones, a los diferentes consulados mexicanos en los Estado Unidos sobran candidatos, unos puede cumplir sus condenas. El Ferrás como cónsul en Guatemala.

Se nos olvida, que la izquierda mexicana en 2001, logró la salida del embajador Boliviano acreditado en nuestro paìs, el Gral. Gary Prado, responsable del asesinato del Che Guevara, el 7 de octubre de 1967.