Coatzacoalcos, Ver. Después de que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) ubicó a Veracruz entre los lugares en donde se ejerce la trata con fines de explotación laboral y sexual en México, la representante de Equifonia, Aracely González, dijo que el panorama coincide con muchos casos de desaparecidos en la entidad, sobre todo por el rango de edad, de 18 a 29 años.
La también integrante de Colectivo por la Paz -donde se aglutinan madres que buscan a sus hijos desaparecidos en un contexto de violencia- indicó que ese diagnóstico confirma que muchos de las personas, sobre todo mujeres, reportadas como ausentes en Veracruz, pudieron haber sido víctimas de las redes de tratantes.
Indicó que las organizaciones criminales han encontrado que la trata de personas es un negocio mucho más rentable y con menos riesgos con la justicia que el tráfico de drogas.
En la organización Colectivo por la Paz -dijo- dan acompañamiento jurídico y afectivo a más de 50 madres y padres que desde el inicio del presente gobierno de Javier Duarte de Ochoa han reportado como desaparecidos a sus hijos.
En la mayor parte de esos casos, además de desaparición forzada, hay elementos que ponen bajo sospecha la actuación te la Fiscalía general del estado.
Esta semana el Fiscal General, Luis Ángel Bravo Contreras, reconoció que tiene bajo investigación a unos 11 ex funcionarios por omisiones en las investigaciones de expedientes de desaparecidos, por no haber actuado de manera correcta y en otros casos por que ellos mismos, se presume, entorpecieron las investigaciones.
En esto coincide con con lo enunciado por el estudio «Diagnóstico Nacional sobre la situación de la Trata de Personas en México«, lanzado esta semana por la oficina de la ONU para Latinoamérica.
Por el conteo de averiguaciones previas y denuncias, en el documento se indica que hay ocho estados de la república en donde se concentra el mayor número de denuncias por trata: «Aguascalientes, Tlaxcala, Chihuahua, Chiapas, Puebla, Oaxaca, Veracruze Hidalgo y el Distrito Federal, donde se concentran 81% del total de APs sobre trata de personas del fuero común. En el fuero federal se observa mayor dispersión, aunque también sobresalen los estados de Chiapas, Veracruz y Tlaxcala», cita el estudio.
Los datos indican que en cuanto a APs abiertas, por el fuero común, están Aguascalientes tiene 89, Chiapas, 88, Puebla 39, Oaxaca 31, Distrito Federal 31) y Veracruz 24.
En el caso de Veracruz, hay una consignación con detenido, cuatro con ejercicio de no acción penal, en reserva ocho y nueve archivadas.
«En el fuero federal se observa mayor dispersión, aunque también sobresalen los estados de Chiapas, Veracruz y Tlaxcala (datos de 20082009)», señala el documento.
En el estudio se señala que Veracruz un estado de origen, destino (en el caso de menores para tráfico infantil y turismo sexual) y tránsito.
«Hay entre 15 y 20 lugares en México que han sido identificados como lugares clave para entender el fenómeno a nivel nacional y aunque muchos se han catalogado principalmente como de origen, destino o tránsito: son Tijuana y Mexicali (Baja California); Nogales (Sonora); Ciudad Juárez (Chihuahua), Nuevo Laredo y Matamoros (Tamaulipas), Cancún (Quintana Roo), Tapachula».
Hay factores, como la falta de educación, que hacen más vulnerable a las víctimas en ciertas regiones, según los mapas mostrados en el estudio.
«La población de la región sursureste es la que muestra la mayor concentración de factores de vulnerabilidad (altos niveles de analfabetismo, menores niveles de empleo, condiciones laborales precarias, altos índices de marginación y pobreza, flujos migratorios constantes y elevados)», dice.
Por ejemplo,los estados que concentran el mayor número de mujeres analfabetas son Chiapas (21.8%), Oaxaca (19.9%), Veracruz (19.3%), Puebla (12.6) e Hidalgo (12.6%). Para el caso de los hombres, los mayores niveles de analfabetismo se presentan en los estados de Guerrero (13.08%), Chiapas (13.5%) y Oaxaca (12.1%)»en esto, se han encontrado modus operandi que han cambiado con el paso del tiempo y otros que siguen vigentes, como la figura de «el que enamora» a las mujeres para engancharlas.
«Se han identificado algunos patrones recurrentes, como el enganche por engaño, tanto en el caso de la trata de personas con fines de explotación sexual como con fines laborales, o por enamoramiento, particularmente en el caso de la trata de personas con fines de explotación sexual.
«Existen nuevas herramientas, como el Internet, que pueden potenciar el modus operandi de los tratantes y facilitar el reclutamiento de víctimas que no necesariamente responden a los perfiles que han sido identificados en situación de mayor riesgo».
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