Ciudad de México. (LaOpinión/SinEmbargo).-Las cámaras de un negocio captaron la brutal acción de una madre a su bebé.
Por eso, cuando el tendero lo presenció supo que necesitaba compartir esas imágenes y la verdad con el mundo para proteger al pequeño.
Si se mira con detalle, se la ve golpeando al pequeño una y otra vez mientras se esconde en un rincón cerca de un estante de ropa.
Luego le coloca un biberón en la boca e intenta obligar al bebé a comer para que se calme. Como el bebé no quiere, la madre se frustra más.
Momentos después, la madre agarra el cabello del bebé y lo jala violentamente. Luego le da una cachetada.
Si está en público y es testigo de abuso infantil, primero puede confrontar al padre, si se siente que eso es seguro. Si no lo hace, puede llamar al 911 si siente que el niño está en peligro.
Si se produce un acto de abuso infantil en público, ¿deberían participar los espectadores? ¿O deberían los padres continuar sus acciones si solo están reprimiendo a sus hijos?
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