Minatitlán, Ver.- Familiares de las personas asesinadas en la masacre del Viernes Santo, amigos, empresarios, integrantes de la sociedad civil, marcharon esta tarde en este municipio, en demanda de que autoridades de los tres nivles de gobierno ofrezcan justicia para las víctimas asesinadas, pero al mismo tiempo, para que detengan la ola de violencia que incrementó como nunca antes en el sur de este estado.
Vestidos en su mayoría de color blanco, algunos con un moño negro, en señal de luto, marcharon y gritaron, «¡justicia, justicia, exigimos justicia!.
Los manifestantes recorrieron las principales calles de Minatitlán, para llegar hasta la presidencia municipal representada por el alcalde de MORENA, Nicolás Reyes quien se lavó las manos cuando las personas le pidieron que ya de resultados para ofrecer seguridad y dijo, «es el fiscal el que debe apurar las investigaciones y detener a las a los responsables, nosotros estaremos insistiendo ante eso».
Otra mujer le respondió al edil, «Ya no más muertos inocentes, mataron a mi hijo un joven de 30 años, él llegó a esta fiesta familiar a las 8 de la noche y a las 8:30 ya lo habían matado, de una manera como se mata a un animal , basta ya, vamos a levantar la voz, no podemos seguir así, hemos votado por un cambio de verdad, por un cambio justo, pero hasta ahora no lo vemos, las cosas están peor que antes», dijo la madre de una de las víctimas entre sollozos, llanto e impotencia.
En la marcha participaron unas 250 personas, cuando se pensaba que el pueblo de Minatitlán, saldría a movilizarse en aras de que las autoridades trabajen unidas para ofrecerles paz, seguridad, derecho a transitar con seguridad de que todo estará bien para los niños, hombres, mujeres, que transiten a cualquier hora por este pueblo.
» Nosotros no estamos viendo los colores, -les pedimos a los que no vinieron, recuerden que ahora fueron nuestras familias, pero mañana pueden ser las suyas, no aceptamos que desprestigien a nuestras familias, eran gente honorable, de trabajo, solo asistieron a una fiesta familiar y nada tenían que ver con pleitos de ningún tipo», dijo que llevó la foto de su hijo pegada en el pecho.
Marcha Fifí.
Conservadores