«Cuando yo era chico me decían que cualquiera podía llegar a presidente de la Nación. Estoy empezando a creerlo” Clarense S. Darrow.
En México y por qué no a nivel internacional, el domingo 5 de abril de 2020 no será recordado como un Domingo de Ramos más, será recordado como el día que el presidente de México López Obrador volvió a presentar de manera faraónica su demagogia despótica ante un pueblo sediento de esperanza. Y es que ante la grave crisis sanitaria y económica mundial constatamos la verdad de Voltaire cuando decía “Es peligroso tener la razón cuando el gobierno está equivocado.
Ayer escribía en mi cuenta de Twitter que me soplé 47 minutos de un discurso vacío, agresivo, divisorio pero con la mínima, sí muy mínima ilusión de escuchar a un presidente de México con sensibilidad política, con ética, que dijera la verdad, pero no fue así, fue el mismo AMLO de siempre demagogo, populista, falseando datos, hablando de temas para dividir y provocativo.
Volvimos a soportar un presidente que igual habla de religión, que de economía, que de salud, de corrupción y todo revuelto, un presidente que no dice nada en claro pero arenga a los que menos tienen para que crean que los tienen son sus enemigos, un presidente que siga sin aceptar sus fallas y culpa de todo al pasado. Y hablando de culpas repetiré lo que alguna vez publiqué de Alberto Moravia: “Curiosamente, los votantes no se sienten responsables de los fracasos del gobierno que han votado”.
Pudimos escuchar como brincaba de Juárez a Roosevelt o bien de sus “logros” de las Universidades Benito Juárez a sus logros en el campo y la salud. Pudimos constatar más de sus mentiras. Dijo que antes que nadie en el mundo México se preparó para la Pandemia, mentira ¿No decías que no pasaba nada, que nos abrazáramos? Hablaba de lo equipado que tiene a los hospitales y el dinero necesario, mentira hoy siguen las manifestaciones del personal que labora en hospitales por no tener lo mínimo de protección, además que has bajado por dos años el presupuesto para salud.
Al presidente de México le vendría bien leer un poco a Confucio por ejemplo para que aprenda que “Gobernar significa rectificar” y debería aprender a no mentir y dejar de usar su frase de oro de campaña de combate a la corrupción, sobre todo cuando no combate la corrupción y sí la ha aumentado. Y quiero ser reiterativo con la idea de que AMLO aprendió bien de la propaganda Nazi y la aplica día con día usando la repetición de frases y mentiras que se vuelven verdades. Él se autoproclama un demócrata pues que aprenda primero que es la democracia, él es el clásico ejemplo del despotismo. Pero además lo grave es que tenemos un gobierno que lo hace mal, con legisladores y parte del pueblo que lo consienten generando una complicidad vergonzosa.
Hoy es una realidad que los avances que tenemos en el control de la Pandemia no son gracias a los López tanto Obrador como Gatell, es gracias a la ciudadanía, gracias a que el pueblo tomó conciencia a tiempo y se supo defender. Hoy vemos como sigue el maquillaje de las cifras, pero como son videntes ya nos preparan para que en 2 ó 3 semanas entremos a la fase 3, que obviamente llegará mucho antes. No hay autoridad que cumpla éticamente su función.
¿Te acuerdas presidente del día que te cuestionaron sobre las cifras de las víctimas de la delincuencia y que dijiste que tú tenías otros datos? Pues ayer vuelves a mentir, la delincuencia sigue aumentando. Las víctimas de la delincuencia siguen aumentando, las mujeres desprotegidas, el desempleo creciendo, y éste no por la Pandemia, ya desde antes, mientes cuando hablas de la baja del precio de la gasolina, NO FUE TU LOGRO, hablas de la maravillosa reforma al artículo 4° de la Constitución y es una mentada de madre, esa reforma generará un sin fín de problemas financieros al gobierno. Atacas a los grandes empresarios y anuncias inversiones públicas privadas y esas inversiones privadas ¿No serán con los fifís empresarios o solo con tus amigos? Insistes en malgastar el dinero inyectando más a PEMEX, por cierto la última calificación a PEMEX de Fitch lo pone casi casi como bonos basura, ah pero eso a ti no te importa y los descalificas.
Dices que ya es hora que el gobierno se apriete el cinturón, que tú lo haces con tu falsa austeridad republicana y no el pueblo. Pues le estás apretando el cinturón al pueblo y a los empresarios que la mayoría son micro, pequeños y medianos empresarios. Y quitar aguinaldos no es tu facultad, el aguinaldo se debe dar por ley, el aguinaldo es un derecho laboral irrenunciable e inembargable. Pero como buen dictador populista usas medidas para manipular a los pobres, a los necesitados, a los ignorantes y así tenerlos bien sumisos. Pero qué crees tu popularidad sigue a la baja, el desacuerdo a tu persona y gobierno siguen bajando.
Y ahora dedicaré algo para tratar de entender el por qué te quieres comparar a Roosevelt puesto que dentro del capitalismo Yanqui él fue el más socialista. Dices que siguiendo su ejemplo sacarás adelante a México solo que no dijiste que él aplicó su New Deal (Nuevo Trato) basado un poco en la visión económica de John Maynard Keynes. Y que además de los programas sociales que aplicó se dedicó a generar gasto público con obras de infraestructura reales, no como tus sueños de Dos Bocas o el Tren Maya o tu tonto aeropuerto. Y te faltó decir que la salida final de la recesión del 29-30 de EUA fue cuando entró a la 2ª Guerra Mundial.
Ahora bien, lo que queríamos oír ayer no era un informe demagógico, era oír el proyecto del gobierno para salir delante de la crisis sanitaria y económica, pero fiel a tu estilo no dijiste nada, no te comprometiste a nada, no diste una salida real gubernamental. No se entiende tu afán de no proteger a todos, sí a todos, los empresarios. Aprende presidente los empresarios sin importar su tamaño son los que generan el empleo, los gobiernos son los que deben crear las condiciones para que lo hagan.
Y para terminar ojalá aprendiera un poco de las políticas contracíclicas que debió anunciar ayer en la economía. En 2008-2009 se aplicaron en México y por eso se lograron reconocimientos internacionales. Nunca escuchó a los que saben de economía y finanzas, nunca escucha, aunque dice que los expertos en salud manejan la Pandemia es mentira, la maneja usted y ellos se agachan, le temen. Si la manejaran expertos antes habríamos tenido más protección, hospitales preparados, pruebas de laboratorio listas, en fin México no se salvará por su gobierno, se salvará por los mexicanos y por la bendición de Dios y la Virgen de Guadalupe.
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