Por José Rojas/Acayucan, Ver.-/ Un grupo criminal rafagueó el reclusorio de esta ciudad la noche de este lunes, causó daños a dos vehículos y dejó una cabeza de cerdo con amenazas para el director y subdirector, Rodolfo Fernández y Héctor Maldonado, lo que movilizó a comandos del Ejército y Marina.
Los violentos hechos se registraron aproximadamente a las 9 de la noche, provocaron el temor de los custodios y demás empleados del centro penitenciario, ubicado en la calle prolongación Guillermo Prieto del Barrio Nuevo de este municipio.
Las detonaciones también causaron alarma de los vecinos del lugar, que reportaron la situación de peligro al número de emergencias 911, cuando vieron que varios hombres dispararon con armas largas de grueso calibre contra el frente del CERESO.
Dos automóviles que estaban en el estacionamiento fueron alcanzados por los proyectiles, antes de retirarse con dirección desconocida, los delincuentes dejaron la cabeza de cochino al lado de una cartulina que contenía amenazas contra los funcionarios del penal.
Ambos tienen poco tiempo de haber sido nombrados en sus cargos, pero son acusados de extorsionar a los internos y a sus familiares, así como también de entregar el control de la población reclusa a una cédula de la delincuencia organizada.
La balacera movilizó a elementos de la Marina-Armada de México y del Ejército Mexicano, que llegaron para resguardar la zona, mientras que oficiales de la Fuerza Civil y de la Policía Estatal realizaron un operativo de búsqueda pero hasta el momento no han detenido a ninguna persona.
Cabe mencionar que esa región del sur de la entidad veracruzana registra altos índices de inseguridad y violencia desde hace tiempo, son constantes los reportes de asaltos, secuestros, extorsiones y personas ejecutadas por gente armada.
Durante los dos años que tiene Hugo Gutiérrez Maldonado como Secretario de Seguridad Pública la situación se ha agravado, debido al pésimo desempeño de los mandos de la Policía Estatal y de la Fuerza Civil, muchos de ellos señalados de corrupción y tener nexos con la delincuencia que controla la región.
Esa cabeza hay que darle buen uso, o tacos o pozole