Marcos Miranda/ Periodista desplazado por la violencia en Veracruz
Tras varios intentos para poder llegar a ser presidente de México en sus 18 años de campaña, por fin López Obrador lo logró. “Haiga sido como haiga sido”, él ganó.
Su triunfo se debió, gracias a que esta vez hubo una institución fuerte, creíble y que no sólo organizó la elección en la que ganó, sino que validó su triunfo electoral. Y no solo eso, le dieron su sobre representación en la cámara de diputados. Por supuesto que me refiero al Instituto Nacional Electoral.
No hubo queja alguna ni se le cuestionó al INE el triunfo de López Obrador. Sin embargo para los propósitos de López, el INE precisamente por esa fortaleza democrática, hoy representa un peligro para López y los integrantes de su 4T.
El presidente sabe muy bien que a dos años y medio, hay ya un casi total rechazo que asciende a un 70 por ciento de los ciudadanos a su gobierno, ante la falta de todos los resultados prometidos. López y sus secuaces saben hoy que las preferencias no les favorecen.
Saben que en los Estados dónde son gobierno como Veracruz con su gobernador, no respondió a las expectativas claras que permitieran el crecimiento de Morena en Veracruz, súmele a eso, las faltas de promesas incumplidas por el mismísimo presidente.
Y así están en todos los estados donde gobierna Morena. No es de adivinar sino de hechos y ellos lo saben, porque ya perdieron y los números hoy no les favorecen, así que la única manera que tienen para poder ganar, es haciendo trampa.
Pero resulta que no pueden porque se les atravesó el INE.
Hábil como es, el viejo zorro ha emprendido ahora para tratar de debilitar a la institución que aún no se ha doblado ante sus amagos, un gran linchamiento mediático, para poder justificar su desaparición.
Igual y como lo hizo con la obra del nuevo aeropuerto de Texcoco, porque no hay hasta el momento, una sola denuncia por corrupción, ni se ha devuelto aún lo que dijo que se habían robado por esa obra cancelada. Por el contrario, hubo que pagarle a todos los empresarios.
Lo mismo sucedió con la extinción de los fideicomisos, que según él los despareció por la corrupción que había dentro de ellos, pero tampoco hay hasta el momento denuncias presentadas por dicha corrupción.
Y ahora con el INE, ya prepara su campaña mediática en contra del Instituto, aunque fue gracias a ese mismo instituto, que López pudo llegar a ser presidente. Así que tratará de destruirlo a como de lugar para intentar como siempre, salirse con la suya.
Como buen dictador, él sabe que las instituciones y sobre todo las instituciones como el INE, no le van a permitir hacer un fraude como quisiera o pretende, para lograr establecer su dictadura perfecta y perversa.
Para que me entiendan, la de él es una dictadura como todas, caracterizada por un solo líder o grupo de líderes, con escasa o nula tolerancia hacia el pluralismo político y la libertad de prensa.
Preferentemente, los dictadores se establecen en países donde el nivel de ignorancia es muy grande y en los que el nivel escolar y académico esta muy por debajo de la media internacional.
La carencia no sólo de dinero sino de valores, hace más vulnerable a este tipo de personas. Y son los más pobres, las presas más fáciles de atrapar para los tiranos.
En México les llaman “Mascotas ”y usan para su fin, el lema de “Primero los Pobres”, como el gancho ideal para atraerlos, engancharlos y luego usarlos.
La izquierda en Latinoamérica ha llegado siempre prometiendo falsas expectativas y las personas ignorantes, carentes de sentido común, son sus primeras víctimas en la línea. Así que comienzan por regalarles dinero y hacerles sentir que ellos si los toman en cuenta. Así logran generar empatía, para luego seguir con el principio del adoctrinamiento.
La estrategia de López Obrador no podía ser nada distinta, se aprovecho de las circunstancias, cuando México pasaba por una crisis no sólo económica y de seguridad, sino una crisis de valores que hasta la fecha están presentes.
Para establecer su dictadura, se necesita por lo tanto, destruir las instituciones. Y usa precisamente a esa mayoría de pobres, para generar movilizaciones y generan el caos.
Porque si no es por las buenas, entonces será por las malas, tal y como ya lo advirtió Félix Salgado Macedonio. Provocarán disturbios si no se le reconoce y se echa para atrás lo que hoy se decidió, al no cumplir con los lineamientos marcados en la ley.
Y pensar que los que hoy son gobierno, aplaudieron a más no poder al INE cuando le dio el triunfo a López Obrador. Justo cuando Mario Vargas Llosa dijo que México cuando había sido gobernado por el PRI, era una “dictadura perfecta”
Pero hoy que les refriega en sus caras, ante sus planes que ya han sido descubiertos, se ofenden.
La única manera de impedir que se establezca esa dictadura en México, es salir a votar en las próximas elecciones. Y no dejar que las minorías ganen. ¡Salga a votar y evite la instauración de una dictadura en el país que nos va a costar muchísimas mas vidas- pues es evidente el pacto con los narcos-mas desapariciones, mas secuestros, mas mujeres vendidas a la trata, mas violencia por doquier pues los señores pactaron con los delincuentes y así se la van a llevar. Pero sólo usted para cambiar las cosas con la fuerza de su sufragio.
Por eso #NiUnVotoAMorenaNunca
Después no digan que no se los dije.
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