¿A que se refiere la revocación de mandato?

Juana de Arco/ Flechadora 

Este ejercicio servirá para medir el número de chairos con los que realmente cuenta el ejecutivo federal. Efectivamente es una medición que hace Andrés Manuel López Obrador para conocer el número de fanáticos con los que cuenta y no verdaderamente para dar la posibilidad de que el pueblo inteligente y realmente bueno, pueda quitarlo del poder.

Sucede que un grupo de personas, integrantes de una asociación civil de nombre “Que siga la democracia” entregó el día de ayer al Instituto Nacional Electoral (INE),  un listado que contenía un millón 68 mil firmas.

Un tráiler con cajas, las cuales contenía dichas firmas llegaron a las instalaciones del órgano encargado en realizar los procesos electorales. De una asociación al parecer está siendo auspiciada por el propio presidente de la República o por su partido político, Movimiento de “Degeneración” Nacional (Morena).

2.7 millones de firmas que deben de entregar al INE a más tardar el 25 de diciembre, para que el 10 de abril del 2022, el organismo autónomo valide el puño de Obrador, más que poner en riesgo su mandato.

Andrés Manuel López Obrador, en mi opinión personal, es un enano que quiere conocer su grandeza. Un diminuto sujeto con problemas severos de aceptación, carece de autoestima, y que necesita un ejercicio de la “revocación del mandato” para conocer verdaderamente si ha logrado fortalecer la pobreza en México y conocer si tiene más mascotitas que alimentar.

Si ustedes hacen un análisis del tipo y características de personas que se congregaron en el zócalo el día de su tercer informe de gobierno; se puede observar que quienes siguen a López Obrador tienen un estereotipo social concordante. Es decir, todos son seguidores con nulos estudios académicos (que los hacen vulnerables y candidatos excepcionales para controlar), gente de muy bajos recursos a las cuales se le pueda manipular con facilidad para que coman de todo lo que les arrojan. Son ese tipo de personas que necesitan que su mesías le arroje al suelo cualquier “borona” para aventarse sin dignidad alguna, a la comilona gratuita. Gente floja y sin aspiraciones.

Eso quiere medir López Obrador. Cuántas personas con poca aspiración educativa tiene y que estén dispuestos a comer lo que él decida merienden. Serviles tipo marionetas y con falta de dignidad, valores y con mucha hambre, para poder hincarse y elevar sus plegarias: “Es un honor, estar con Obrador” en unísono.

Es por ello, que Obrador no se siente cómodo con la clase media. Regularmente ese sector de la población, tiene un nivel académico elevado (licenciaturas, posgrados y empresarios), son los que realmente mueven a este país en todos los rubros. Dentro de la educación, de la investigación, del fomento y creación de empleos a través diversas actividades económicas que fortalecen la economía del país.

Pero es un sector muy difícil de controlar y por la limitación intelectual del presidente de la República, no logra entender su peculiar e inteligente forma de comunicarse. Un sector que en su gran mayoría, mantiene un nivel académico alto que es paradójico a su capacidad intelectual. Los hijos de estos, cuentan con estudios y hasta hablan varios idiomas; y él, con mucho trabajo logra dominar en un 20 por ciento el castellano. Son una verdadera amenaza para un hombre tan pequeño como López Obrador. Ese grupo jamás asistirá a una congregación de borregos, como lo vimos el pasado 01 de diciembre del 2021 en el Zócalo capitalino.

Característica de un Chairo

Este tipo de personas, como sugerimos en líneas más arriba, son sujetos de bajo nivel intelectual (hasta analfabetas), de pequeñísimo nivel económico o de pobreza extrema, a quienes han beneficiado a través de los programas sociales. Y no tan sólo a ellos, sino a los hijos de estos que no trabajan, que no estudian, a quienes les otorga becas y hasta dinero gratuito para ser un mantenidos sociales. No producen ni una milésima de  centavo de lo que se gastan.

La finalidad y objetivo del proyecto político de Obrador, es crear fósiles sociales  para diseñar un escenario político donde evolucione la “Transformación de Cuarta”, esa que tanto promueve y hasta se ofende cuando se la critican. Y con ello tener la posibilidad de hacer de la presidencia de la República de nuestro país, un negocio rentable para él y sus parásitos hijos, al perpetuarse en el poder. Es por ello, que él y su familia viven como virreyes.

Conclusión

La verdadera médula de la cuarta transformación es crear una sociedad débil, sin aspiraciones, sin dignidad y sumamente pobre. Y con ello, alcanzar consolidar su mandato perpetuo y ser el último presidente de la República electo y el primero ejecutivo federal como dictador.