Un rector Virrey

Martin Gerardo Aguilar Sánchez rector de UV gana salarios de super lujo junto con sus subalternos, mientras muchas facultades no tienen ni sillas
- en Foro libre

Juana de Arco/ Flechadora

Entre corruptos se tapan con la misma cobija. En verdad que es sorprende la doble moral de los políticos, los cuales se ponen severos con la corrupción del “de frente”, pero cuando se trata de la propia, pues se vuelven como  la “rola” de la Shakira: Ciego, Sordomudo, Y así le pasa al flamante rector de la Universidad Veracruzana, Martín Gerardo Aguilar Sánchez quien ha sido balconeado por el columnista Miguel Ángel Cristiani González, titulada “La pesada y abultada nómina de la UV”, en donde expone el flamante sueldazo que Rector, Vicerectores, el Secretario Académico, Contralor General, Directores Generales de las áreas Administrativo, del SEA,  de el Área Académica, entre otros.

Solo de los angelitos antes mencionados, el total de lo que se deroga en sueldos a estos altos funcionarios erogan un total de $913, 981.30 sin contar sus percepciones adicionales que cada uno se lleva de manera mensual. Nada despreciable, pero me pregunto (que por cierto no puedo contestar) ¿Por qué la autoridad siempre alude que no hay dinero suficiente para invertir en recurso académico y para mantenimiento de los inmuebles de las diversas facultades?.

La universidad veracruzana es el alma mater de muchos veracruzanos. Y sabemos que las necesidades de las facultades en todo el estado son extremas, no tan sólo en cuestión de mantenimiento de sus inmuebles, sino también en equipamiento académico. Los jóvenes derivado del incongruente e inoperante plan de estudios “flexible”, por la falta de maestros, tienen que literalmente vivir en sus facultades. No pueden trabajar porque no hay un menú de catedráticos impartiendo una materia para que ellos puedan hacer sus horarios de estudios.

Y no entendemos la causa, porque si juntamos el presupuesto anual asignado a la Universidad Veracruzana y el negociazo que año con año hacen con los exámenes de admisión, podrían abrir convocatoria para contratar a más catedráticos y la oferta académica para los alumnos, fuera mucho más óptima.

Año con año la máxima casa de estudios en Veracruz (UV) realiza el proceso de admisión para jóvenes interesados a ingresar a alguna de las carreras que oferta dicha institución educativa. La matrícula para el 2021  que ofertó fue de 16 mil 119. Pero dolosa e inmoralmente permite que sean más los jóvenes que paguen un arancel para el examen de admisión que la autoridad máxima de la Universidad Veracruzana (rector) permite, aun a sabiendas que sus espacios no son muchos comparados con la demanda.

Rector UV Martín Aguilar Sánchez, no llegan los cambios a la UV que prometió en su campaña interna

Un negocio redondo. Este año, fueron 37 mil jóvenes que hicieron el examen de admisión, de los cuáles, únicamente 16 mil 119 alumnos de nuevo ingreso al ciclo escolar 2020-2021.

Es decir, 20,881 jóvenes rechazados de los cuáles, de acuerdo al portal de la Universidad Veracruzana tienen que pagar el arancel para derecho a examen de $730.00 si los aspirantes si son mexicanos y $2,191.00 para los de nacionalidad extranjera.

Supongamos que los 37 mil son de nacionalidad mexicana. Ingresó inmoralmente la Universidad Veracruzana en el proceso de admisión 27 millones 10 mil pesos. Es decir, 15 millones 243 mil 130 pesos son de aquellos jóvenes que hicieron su trámite pero que ni de broma podrían ingresar a universidad. Un negocio redondo pero corrupto indudablemente.

Porque las autoridades educativas si saben que solo tienen espacio para 16 mil 119 alumnos, ¿Por qué fregaos permite que 20, 881 jóvenes más, realicen el pago de un arancel para el examen de admisión que no podrán hacer válido?

Y si de todo esto le sumamos que el presupuesto anual (según advierte el columnista) es de 8 mil 714 millones de pesos y que la mayor parte se destina para pagar lo que se denomina “servicios personales” y que significa una erogación de 5 mil 470 millones. Es decir el presupuesto sirve para pagar los sueldos (elevados para los de alto nivel) y el resto, es canalizado para mejoras de las facultades.

Mi pregunta es:

¿Qué le hace el rector a lo que ingresa año con año por el proceso de admisión inmoral que realiza para jóvenes de nuevo ingreso?

Un dinero que deberá de estar en alguna cuenta de Sara Delfilia Ladrón de Guevara (a quién le hace honor a su apellido), pues de acuerdo a la auditoría que practicó el Organismo de Fiscalización (Orfis) a la UV, el daño patrimonial es de un millón 684 mil pesos y un montón de obras inconclusas, pagos excesivos por volúmenes de obras no realizadas , comprobaciones de gastos fuera de la norma e incumplimiento de la realización de las obras. Además de 10 terrenos sin documentos de propiedad de la UV, inmuebles no localizados, perdidos y sin papeles legales; así como pasivos de financiamiento de créditos fiscales y capitales que generaron multas y recargo.

Espero que el rector Martin Aguilar Sánchez,  no tan sólo se ocupe de auto asignarse el sueldo de virrey con la que goza, y opere realmente con honorabilidad (lo dudo) para brindar beneficios a todas las facultades que controla la Universidad Veracruzana. Y también en denunciar ante las instancias competentes, el daño patrimonial que Sara Ladrón de Guevara originó en las arcas de la alma mater. Hasta ahora, no ha ordenado ni anunciado que le practicará auditoría a su gestión y eso suena a complicidad. Lamentable. 

 

 

 

 

 

Comentarios

  1. Por qué aceptan el pago de todos los jóvenes que presentan el examen? Pues porque no se sabe quienes lo van a pasar! El dinero no se le queda a la UV. Eso si, ganan un chingo de lana.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *