Manuela V. Carmona
Ixtaczoquitlán, Ver.- Como un acto de intimidación, de hostigamiento y represalias hacia su persona, el regidor tercero del Ayuntamiento de Ixtaczoquitlán Oscar Maciel Dorantes calificó las acciones que autoridades municipales representadas por Nahúm Álvarez, han realizado en su contra, pues aseguró en las últimas semanas hay una persecución política por las denuncias de los malos manejos que ha hecho sobre la administración municipal.
En entrevista detalló que de manera recurrente han estado deteniendo a sus colaboradores y sus unidades vehiculares, por lo que han tenido que pagar multas de más de 5 mil pesos bajo el supuesto de agresión a la autoridad, siendo el más reciente el del martes pasado en donde más de 20 policías detuvieron al chofer de uno de sus camiones el cual presentó una falla mecánica.
Detalló que el martes por la tarde, alrededor de las 16:30 horas, se descompuso un camión con razón social de su compañía en el tramo de las cumbres de Campo Chico porque es un camión ya viejo pero que cuenta con todos los documentos, pues trae póliza actualizada, permisos y demás, por lo que al no encontrar fallas agredieron al chofer argumentando que fue él el que “se puso agresivo”.
Agregó que intimidaron al mecánico que estaba ahí tratando de reparar la unidad mientras que el camión se lo llevaron sin que al momento conozcan a dónde, además de que al trabajador lo golpearon y detuvieron con la excusa de que iba bajo el influjo de estupefacientes, pero nunca se le hizo una prueba para detectarle sustancias, pero con esa falsa acusación le cobraron 5 mil 500 pesos para dejarlo en libertad.
Agregó que a pesar de la situación de inseguridad que hay en el municipio, para detener a ese trabajador llegaron tres patrullas de la policía, tres de tránsito y una de Protección Civil, al menos 20 elementos con los directores de área.
Y es que expuso que como representante de la población, ha denunciado el que no se llevan a cabo sesiones de Cabildo abiertas, la falta de información en la página de transparencia, sin que a la fecha se conozca cuánto gana el alcalde, entre otras anomalías.
“La acción la tomo como un acto de intimidación, de hostigamiento, de persecución política y represalias hacia un servidor por las diferentes acciones que he exhibido y denunciado en el mal actuar de la presente administración municipal y diferentes testigos indican que el asunto es «personal», o «político», a decir del jefe del ejecutivo Municipal por lo cual someteré al actuar de las Leyes constitucionales meritorias al caso, amén de ejecutar las acciones legales
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