Efraín Hernández
Plumas libres
Córdoba.- Propietarios de bares y cantinas enfatizaron que con la implementación de la ley seca, que entrará en vigor en el primer minuto del sábado primero de junio, se estiman pérdidas de hasta un 30 por ciento. Afirmaron que esta ley, implementada en el marco de la jornada de votaciones, se basa en el artículo 300 de la Ley General de Instituciones y Procedimientos Electorales, que prohíbe la venta de bebidas alcohólicas a partir de las cero horas del primero de junio.
Fernando Páez, gerente de un conocido bar, explicó que la medida afecta directamente a su negocio ya que se implementa durante el fin de semana, los días de mayor venta. «Estos días son cruciales para nuestro negocio y no podemos recuperar las ventas perdidas,» comentó.
Además de la disminución en ingresos para los propietarios, Páez destacó que la Ley Seca también impacta negativamente en la economía de los empleados, quienes dependen de las propinas que reciben durante estos días de alta actividad. «Muchos de nuestros empleados ven una reducción significativa en sus ingresos por propinas, que en algunos casos representan una parte considerable de su salario,» agregó.
Sin embargo, señaló que la aplicación de la ley no afecta a todos por igual. Muchos ciudadanos se preparan con antelación comprando bebidas alcohólicas antes de la entrada en vigor de la ley. Adicionalmente, los comercios que venden bebidas para llevar aprovechan la situación para lanzar ofertas especiales.
El propietario también mencionó la aparición de comercios clandestinos que operan durante la Ley Seca, vendiendo bebidas alcohólicas de manera ilegal. Hizo un llamado a las autoridades para que vigilen y sancionen estas prácticas de manera equitativa. «Es fundamental que las autoridades se aseguren de que todos cumplan con la ley para evitar competencias desleales,» concluyó.
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