Efraín Hernández
Córdoba. – En el desfile cívico-militar del 16 de septiembre en Córdoba, la participación de 17 escuelas, la policía municipal, la Marina Armada de México, la Unidad Municipal de Protección Civil y Bomberos, así como varias asociaciones civiles, destacó por su limitada representación. La baja asistencia en el evento también evidenció el desprecio hacia la administración del presidente municipal Juan Martínez Flores. Dónde solo 5 regidores y la Sindica Vania López se hicieron presentes.
Entre los ediles que estuvieron presentes en la parada cívica, se destacó a Isamar Balderas Flores, Georgina Aguilar Sánchez, María Luisa Martínez Ramírez, Jonathan Rosas Blanco, se hicieron presentes en un palco improvisado, de un total. Esta ausencia de siete regidores resalta la notable ruptura dentro del Cabildo cordobés.
La escasa participación en el desfile refleja el descontento generalizado con la administración de Juan Martínez Flores. Las calles de Córdoba están en pésimas condiciones, con numerosos baches que dificultan el tránsito y evidencian el abandono en el mantenimiento urbano. Este mal estado de las vías ha llevado a que muchos ciudadanos se sientan frustrados y desilusionados, influyendo directamente en la baja participación de las instituciones en el evento cívico.
El descontento de los ciudadanos se manifiesta no solo en la escasa presencia en eventos oficiales, sino también en las crecientes quejas sobre la gestión municipal. La falta de atención a los problemas de infraestructura y el mal estado de las calles subrayan la desconexión entre la administración local y las necesidades de la comunidad, evidenciando una creciente molestia hacia el actual gobierno.
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