De la redacció/
Córdoba.- Dentro de las irregularidades detectadas en la administración que preside el alcalde de Córdoba Juan Martínez Flores se detectó que contrató como su jefa de prensa a Karla Aquino, una comunicadora que estuvo al frente del Módulo de Pasaportes que operaban para el municipio y la Secretaria de Relaciones Exteriores ( SRE) durante la gestión de Paco Portilla y que demandó a la gestión por presunto despido injustificado, logrando que el mismo alcalde Juan Martinez, le autorizara apenas en Agosto, una indemnización por al menos 273 mil pesos.
A finales de agosto, sin la autorización del Cabildo, el alcalde poblano Juan Martinez gestionó el pago de la indemnización para Karla Aquino, mientras otros 44 casos laborales aún siguen pendientes, sumando más de $10 millones de pesos. Esta situacicón, da a pensar que el área de Comunicación Social es una de las «cajas chicas» del edil pues resulta incongruente que contrate como su vocera a quien demandó al ayuntamiento y que le sacó a las arcas municipales casi 280 mil pesos.
El presidente municipal Juan Martínez Flores, junto con su asesor de confianza Antonio Martínez Hernández, parecen estar haciendo «negocios» en el área de Comunicación Social, donde los señalamientos por manejos dudosos no cesan. Un ejemplo claro de esto, es la reciente contratación de esta presunta periodista como Vocera, a quien designó para que firme sin ningún problema, los pagos que Juan Martínez realiza a diversas personas, que NO son periodistas ni con las que el ayuntamiento tiene firmado algún contrato de servicios que cumpla con los requisitos que establece la ley.
Kara Aquino, ya enfrenta múltiples quejas por parte de la ciudadanía y empleados del Ayuntamiento. Las críticas señalan errores constantes en los boletines informativos, desde faltas de sintaxis hasta confusión en nombres y cargos de directivos y funcionarios. La falta de precisión en los boletines es motivo de reclamos, lo que agrava la percepción de que su nombramiento fue más una negociación que una decisión basada en competencias y dentro del marco legal.
Esta serie de decisiones y manejos oscuros dentro del Ayuntamiento cuestionan las verdaderas prioridades de la administración de Juan Martínez Flores que a lo descarado saquea las arcas municipales mientras sus negocios personales florecen.
En tanto el área de Comunicación Social estrena su cuarta vocera-negociadora- las quejas siguen acumulándose, parece que los intereses particulares de ciertos servidores y su cercanía con el poder prevalecen sobre las necesidades de la población.
Mas adelante se revelarán los nombres de las personas a las que el alcalde Juan Martínez les autoriza el pago mensual jugoso «a través de Comunicación Social», por presuntos servicios «que no cumplen con los requisitos que establece contraloría» municipal, pero que parecen ser suministros de recursos para el mismo alcalde Juan Martínez y su novia contadora que también es cómplice en el desvío de recursos.
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