Por Manuela V. Carmona/
Orizaba, Ver.- En el marco de las actividades previas al Día Internacional de la Mujer (8M), el Centro de Derechos Humanos Toaltepeyolo AC, encabezado por la abogada Adriana Morales, llevó a cabo la campaña “Escuchamos, pero no juzgamos” en espacios públicos de la ciudad de Orizaba, iniciativa con la que buscan recabar opiniones y testimonios de la población sobre la situación de las mujeres, así como visibilizar las problemáticas de violencia, inseguridad y desapariciones que afectan a la región.
Mari Cruz Baltazar, responsable de comunicación del centro, explicó que la campaña consiste en acercarse a la ciudadanía para escuchar sus perspectivas sobre el Día de la Mujer, sin juzgar sus opiniones. “Hemos recibido diversas respuestas, desde quienes piden más seguridad y derechos para las mujeres, hasta quienes consideran que no debería haber felicitaciones en esta fecha, pues se trata de un día de lucha y reflexión”, detalló.
La actividad se ha realizado a lo largo de este mes, iniciando la semana pasada en la Alameda y este miércoles en Plaza Bicentenario, donde el equipo de Toaltepeyolo AC tuvo acercamiento con la población. “Hemos tenido una gran participación, especialmente de jóvenes, quienes invitan a sus amigas, novias y familiares a sumarse.
También se han acercado personas adultas, incluyendo hombres, algunos de los cuales desconocen el significado del 8M”, agregó Baltazar. Además de recopilar opiniones, la campaña ha servido para documentar testimonios de mujeres que han enfrentado violencia o que tienen familiares desaparecidas. “En las Altas Montañas, donde trabajamos, hemos detectado un aumento en las desapariciones de mujeres, especialmente niñas de entre 12 y 16 años.
Esto representa un foco rojo, ya que existe el riesgo de que estén vinculadas a delitos graves como la trata de personas”, señaló Adriana Morales.
La abogada destacó que este ejercicio no solo permite conocer las percepciones de la sociedad, sino también identificar las áreas de oportunidad para mejorar la seguridad y garantizar los derechos de las mujeres. “Las mujeres siguen siendo uno de los grupos más vulnerables a violaciones de derechos humanos. Por eso, es fundamental escuchar sus experiencias y trabajar en soluciones concretas”, afirmó.
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