Luis Ortiz
Pese a que en supermercados el precio de la papaya alcanza hasta 40 o 50 pesos por kilo, en el campo la realidad es muy distinta. Productores enfrentan una crisis marcada por enfermedades, plagas y altos costos de producción que ponen en riesgo la rentabilidad del cultivo, advirtió Olivia Reyes Hernández, presidenta del Consejo Nacional de Productores de Papaya.
“Todo esto afecta. Existe esa incertidumbre constante de qué va a pasar con la fruta. Si se queda en campo, se pierde, y eso daña toda la cadena. Y no solo a nosotros los productores, también a los exportadores y a los consumidores, porque los precios suben como todo en la canasta básica”.
En Veracruz, apenas el 10 por ciento de la producción de papaya se exporta, y solo a través de dos empresas. El resto se comercializa en el mercado nacional.
A nivel nacional, entre el 20 y 25 por ciento de la papaya mexicana se envía principalmente a Estados Unidos, mientras que el resto se queda en el país.
Durante el último ciclo agrícola, los precios en campo fueron extremadamente bajos. En noviembre de 2023, el kilo se pagaba a solo 1 peso, mientras que en diciembre subió a 3 pesos. Actualmente, el precio ronda entre los 9 y 10 pesos por kilo. Aunque esta cifra permite continuar con el cultivo, sigue siendo insuficiente frente al incremento de los costos de producción.
“En los últimos años se nos ha complicado mucho producir. Las plagas y enfermedades han incrementado, y aunque el precio ha sido más o menos equitativo, no refleja el esfuerzo que implica sacarla adelante”, señaló Reyes Hernández.
En cuanto a superficie sembrada, la situación también es crítica. A nivel nacional, se calcula entre 8 mil y 10 mil hectáreas cultivadas, mientras que en Veracruz apenas se alcanzan entre mil 500 y 2 mil hectáreas. “Ha bajado mucho la superficie. Antes teníamos más productores, pero muchos ya no pueden sostenerse”, reconoció.
Uno de los factores más preocupantes es el encarecimiento de los insumos, lo que ha obligado a los agricultores a establecer un precio mínimo de referencia. “El kilo de papaya no puede estar abajo de 6 pesos, porque simplemente no sale. Todo está muy caro”, advirtió.
La dirigente hizo un llamado a las autoridades para implementar apoyos, mejorar la infraestructura y diseñar políticas públicas que fortalezcan la producción de papaya, un cultivo clave para la seguridad alimentaria y la economía de diversas regiones tropicales del país.
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