Luis Ortiz
La detección tardía del cáncer infantil sigue siendo una preocupación grave en México, donde menores de edad son diagnosticados cuando la enfermedad ya se encuentra en etapas avanzadas, lo que reduce drásticamente sus posibilidades de sobrevivencia.
La presidenta de la Asociación Mexicana de Ayuda a Niños con Cáncer en Veracruz, Susana Lara García, señaló que incluso bebés han tenido que ser sometidos a intervenciones quirúrgicas severas debido al avance del padecimiento.
“Tenemos niños que ya llegan en etapas avanzadas, pero por ejemplo este bebé… ya le extirparon algunos órganos de su cuerpo porque el niño ya tenía un tumor, le va invadiendo”.
Señaló que este tipo de casos no son aislado, ya que la agrupación reciben a menores de dos, cinco o seis años con diagnósticos de cáncer en fases avanzadas.
“Son niños muy pequeños y las células cancerígenas están más activas porque están ellos apenas surgiendo… están en pleno desarrollo”.
Además, advirtió que la tasa de sobrevivencia en México para pacientes pediátricos con cáncer es del 57%, en contraste con países como Estados Unidos, donde alcanza el 84%, o en naciones europeas con sistemas de salud más fortalecidos.
“Sí tenemos que trabajar como sociedad y lo estamos haciendo. Empresas que se están uniendo del sector salud a nivel privado, pues para promover la detección oportuna, para promover la salud”.
Exhortó a los padres de familia a no ignorar síntomas como moretones inexplicables, fiebre constante, fatiga o inflamación de ganglios, pues la atención temprana puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte.
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