Ciudad de México. (La Jornada). El cantante mexicano Luis Miguel tocó fondo, pero ahora es «una persona renacida«, dijo el biógrafo español Javier León Herrera, autor de un libro que sirvió de base para la bioserie que estrenará el domingo la plataforma Netflix.
Herrera es autor del bestseller de 1997 Luis, mi rey y acaba de publicar, con la colaboración del periodista mexicano Juan Manuel Navarro, «Luis Miguel: La historia» (Aguilar), una biografía autorizada.
«Cuando un ser humano pasa por una época mala, se mete en una especie de desierto, de oscuridad«, dijo Herrera en una entrevista que concedió junto con Navarro a la agencia dpa en Ciudad de México.
Los autores afirman que el libro se publica ahora porque es un momento grato en la vida del cantante, de 47 años. «No hubiera sido el momento, si él no hubiera pasado la crisis», dice Herrera.
En «La historia» se profundiza en el tema de la desaparición de la madre de Luis Miguel, cuya ausencia marcó profundamente el carácter del cantante, su vida con crisis de drogas y alcohol, rupturas con diferentes parejas y la dificultad de ser padre.
La madre de Luis Miguel, la italiana Marcela Basteri, desapareció de manera misteriosa en 1986 cuando él tenía 16 años. Nunca pudo encontrarla y con el tiempo la búsqueda fue más difícil por su carrera.
«Y además ha sido una y otra vez engañado. Cuando le decían que estaba en un lugar, iba y no estaba», cuenta Navarro.
«Cuando la quiso encontrar, ya no había oportunidades. Él creía mucho lo que le decía su padre, que estaba en Italia, que estaba bien.
Finalmente, cuando él rompe con su padre y empieza a buscarla, ya era tarde. Además se sintió muy traicionado por él».
Algunos amigos sirvieron de apoyo a Luis Miguel Gallego Basteri, nacido el 19 de abril de 1970 en Puerto Rico, para salir de la crisis personal y profesional «donde estuvo metido varios años», dice Herrera.
Navarro afirma que una pieza clave fue Miguel Alemán Magnani, amigo del cantante y empresario inversionista en «Luis Miguel. La serie», «que nunca lo vio como el artista sino como el ser humano».
«En todo este camino ha perdido amigos, muchos de los cuales lo han traicionado», señala Navarro.
Para el biógrafo español, Luis Miguel «en la vida ha tenido todo, menos a su madre». El libro está dedicado «a la memoria de Marcela» por la importancia que tuvo en la existencia del cantante.
«Para cualquier ser humano, lo que uno vive en la infancia, el entorno en el que se desarrolla y se cría, lo condiciona mucho a la hora de enfrentar la madurez. Luis Miguel no es la excepción. Él no ha podido establecer una familia, estabilizar una relación y estabilizar una paternidad», dice Herrera.
Luis Miguel ha tenido varias relaciones, de las que nacieron tres hijos. Con la modelo y cantante Stephanie Salas tuvo, siendo ambos muy jóvenes, a Michelle Salas, a quien reconoció apenas en 2007, cuando ella tenía 18 años.
Ese acercamiento se dio después del nacimiento del primero de los dos hijos que Luis Miguel tuvo con la actriz Aracely Arámbula.
«El inicio para contar la historia de Luis Miguel, allá por el año 1996, fue como contar la vida de Napoleón. No sólo había pocas cosas en la prensa, sino que me iba a ser imposible hablar con Luis Miguel», cuenta Herrera.
«Ahí empiezas a hacer mucha investigación y a mezclarte con las personas que han sido clave en su vida. En este mi segundo libro, hay cosas muy pesadas, pero siempre con mi admiración y respeto», agrega.
Ahora Luis Miguel está en una buena etapa de su vida. «Él ha tocado fondo y estamos ante una persona renacida, más espiritual. Lo único que va a necesitar es alimentar el alma y no el cuerpo con ningún tipo de sustancias», dice el autor.
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