Xalapa, Ver. En los primeros dos meses de 2015, en el estado de Veracruz se registraron 27 sismos de entre 3 y 4 grados richter, esto de acuerdo con el Servicio Sismológico Nacional.
En ese sentido, Armando Aguirre Hérviz, coordinador del Centro de Políticas Socio-ambientales del Partido del Trabajo, dijo que la alerta es que de no prohibirse la técnica de fracturación hidráulica o fracking, la sismicidad podría ser más frecuente y más intensa.
Asimismo, refirió que durante 2014 se registraron en promedio dos sismos por semana, mientras que en 2015 han ocurrido 3.4 sismos semanales.
“De mantenerse esta tendencia, este año tendríamos en Veracruz entre 156 y 176 sismos en el año, contra los 105 que ocurrieron el año pasado. Esto significaría un incremento de más de 600% de los 24 eventos sísmicos que se presentaron durante 2006”.
TEMEN MÁS SISMOS POR FRACKING
La pregunta y preocupación, dijo el coordinador del Centro de Políticas Socio-ambientales, es qué efectos tendrán los movimientos telúricos sobre los 14 mil kilómetros de la red de ductos petroleros, así como qué medidas está tomando protección civil al respecto.
El tema es delicado y más cuando se piensa en que los llamados pozos letrina, de Pemex, así como la técnica del fracking podría incrementar el número de sismos, poniendo en riesgo a la población.
En Oklahoma, Estados Unidos, cuatro pozos de inyección de aguas residuales de la industria petrolera, se han relacionado con más de dos centenares de sismos de entre 3 y 4 grados Richter, refirió Aguirre Hérviz.
En este tema, de acuerdo con el Sistema nacional de Hidrocarburos, Pemex tiene 34 pozos letrina donde inyecta enormes volúmenes de aguas residuales de la industria, de éstos 17 están ubicados en Moloacán, 8 en Las Choapas, 5 en Agua Dulce, 3 en Minatitlán y 1 en Coatzacoalcos.
Además, debido a la Reforma Energética que contempla una inversión de entre 26 y 29 mil millones de dólares para la industria petrolera en Veracruz, se calcula que se perforarán unos 20 mil pozos que usarán la técnica de fracking, la cual contempla implosiones que podrían fomentar más movimientos sísmicos, indicó.
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