Por Ana Lilia Velázzquez/
Xalapa, Ver.- Este 18 de marzo –Día de la Expropiación petrolera- en el congreso local no hubo nada que festejar, tan así que los priistas despreciaron el evento y solo enviaron como su representante al diputado del Partido Alternativa Veracruzana (AVE), Francisco Garrido Sánchez.
En medio de la amenaza de miles de despidos de trabajadores petroleros en la zona sur, el legislador afín al PRI, de manera cándida dijo confiar en “que esos despidos no se den, que se mantenga la planta de PEMEX, que es muy importante para la zona sur del estado.”.
-¿Se vale festejar ante la amenaza que hay de despidos?, se le inquirió.
-Hasta ahorita no hay nada oficial, solo se trata de amenazas veladas.
-¿Hay algo que festejar?
–Hay que mantener el respeto por las instituciones, el garantizar la protestad del petróleo en México, se trata de un tema que se tiene que celebrar.
El 18 de marzo de 1938 por el presidente de la República, el general Lázaro Cárdenas del Río se nacionalizó la industria petrolera como resultado de la aplicación de la Ley de Expropiación de 1936 y del Artículo 27 de la Constitución Mexicana a las compañías que explotaban estos recursos.
A 77 años de este acontecimiento decretado para desprivatizar la producción de petróleo y para reservarse el derecho de explotar y obtener el control de las ganancias (absolutas) de este recurso, el Gobierno Federal modificó los artículos 25, 27 y 28 de la Carta Magna a través de la reforma energética, permitiendo con ello la inversión privada (extranjera) al sector petrolero y de gas, situación que la izquierda ha llamado el mayor atraco a la nación, e incluso, el robo del Siglo a México.
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