Los hijos del divorcio

Inocencia Robada o un comienzo a medias

En la separación a veces enseñamos a los hijos, que es mejor estar en lo cierto que ser amados

Por Osciel Ronzón Muñoz                                                              Psicoterapeuta 

Hablar del divorcio en nuestra sociedad Mexicana, es narrar una serie de contextos que se vinculan con la separación de las familias, entre estos escenarios destacan; la custodia de los hijos, pensión alimenticia, la repartición de bienes,  sin añadir las afectaciones emocionales que repercute en los hijos.

En las situaciones legales cohabitan emociones que convierten al proceso de divorcio en una lucha de poder y ego, en esa disputa algunos progenitores utilizan a los hijos para vengarse del otro, impidiendo las visitas o limitar las horas de convivencia, también como escudos económicos para que el padre de más dinero en las pensiones alimenticias, subrayando aquellas situaciones donde son utilizados como medio de canje;  entendiéndose esto como factor monetario o de objeto, habitualmente se suele escuchar por parte de alguno de los progenitores la siguiente frase: no hay dinero no ves a tus hijos(as) o bien son manipulados como mensajeros o para acercamiento entre los padres descalificando las necesidades de sus hijos (afecto, amor, crianza, dedicación de tiempo, estabilidad y lo más importante ser queridos.)

Padre y madre argumentan que sus acciones son por sus hijos, aunque la mayoría obedecen a sus impulsos egoístas, motivados por enojo, ego, venganza, rencor o por estado de inmadurez, tomando decisiones unilaterales basados en sus emociones y no en la razón, En esta transición los hijos pueden jugar un papel significativo, aunque la mayoría de los hijos no logran que sus padres se reconcilien, si alcanzan a disminuir las confrontaciones que permitan buscar nuevas negociaciones que logren beneficiarlos.

Cabe mencionar, la existencia de algunos hijos expresando sentirse aliviados por la separación de sus padres por los constantes episodios de violencia que como espectadores eran testigos silenciosos,  refiriéndose a estas situaciones con aprensión, angustia, desesperanza, enojo. Aunque paradójicamente desean que la familia este unida nuevamente, estas esperanzas ocurre por el sentimiento de afiliación y pertenencia familiar.

Se considera que existe el mito que a partir del divorcio la vida de los miembros de la familia se resuelve. En la mayoría de los casos es inicio de nuevos problemas, hasta mayor de los que vivían en su dinámica intrafamiliar.

A continuación enumerare algunos de esos nuevos problemas que surgen a partir del divorcio;

-Pérdida de poder adquisitivo. División de gastos, el padre o madre que no esté en la custodia, ahora debe contar con sus propios recursos financieros para sus consumos diarios afectando en los gastos que requieren sus hijos en su cotidianidad

-Convivencia forzada con un padre o con miembros de la familia de alguno de ellos. Este factor con lleva una convivencia con adultos, muchas veces muy enriquecedora y otras no, por el riesgo de sufrir maltrato físico, verbal o abuso sexual en los menores. Así como la falta de un crecimiento integral por el alejamiento de un progenitor. Aunque hay sus excepciones, donde los hijos se desarrollan mejor con un solo progenitor

-Disminución de la acción del padre con el que no conviven. Disminución de sus posibilidades de formación de valores, de amor, respeto y de influencia constante en él hijo (a). Aunque algunas influencias que no favorecen en la formación normativa de los hijos.

-Introducción de parejas nuevas de los padres. Es un factor relevante en la adaptación de los hijos y tiene un efecto significativo en la relación padre o madre/hijo. Influenciados quizás por la buena relación del hijo(a) con ese nueva figura. Aunque también se destaca el riesgo de sufrir abuso sexual o violencia física y/o verbal.

Sin embargo no son las únicas realidades lamentables que experimentan los hijos del divorcio, sus narrativas son de confusión, futuro incierto, culpabilidad, tristeza, abandono, alteración de su sistema nervioso, incontinencias nocturnas, somatización de problemas orgánicos, inseguridades, trastorno de ansiedad, leve depresión, bajo rendimiento académico, baja percepción de su autoconcepto, dificultades interpersonales e inestabilidad, así también un incremento en el riesgo de desarrollar adicciones y con la posibilidad de intentos de suicidio–

En esta suma de afectaciones, los hijos del divorcio han buscado alternativas de afectos y atención cubriendo esa necesidad en la calle, psuedoamigos o en las nuevas tecnologías como; Smartphone, computadoras conectándose a comunidades virtuales llamadas – redes sociales – ignorando que esa carencia se disfraza en una perversidad corriendo el riesgo de ser víctimas de prostitución infantil, trata de niños y adolescentes, esclavitud laboral, entre otras situaciones lamentables. Bajo estos entornos de riesgos que acorralan a esta población vulnerable, urge que los progenitores tomen decisiones coordinadas que permita prevenir este tipo de delitos que trasgreden la integridad de la inocencia.

Como verán es una lista de situaciones atroces, que los hijos del divorcio se encuentran en mayor peligro que los hijos de familias estables. Desafortunadamente padre y madre hacen omisión a estos riesgos por estar inmersos en sus propios problemas y conflictos en su egoísmo han olvido que sus hijos también viven el divorcio con impacto y sufren, cometiendo el típico error de asumir que las vidas de sus hijos serán igual como eran antes y creer que son resistentes ante los problemas que no son suyos, incluso ignorando que su corazón se  quebranta al dividirse por papa o mama.

Por lo tanto los progenitores deben asumir que ambos fallaron en su rol por igual, han censurado el discurso que prometieron ofrecer, ahora tienen la responsabilidad moral de dar un nuevo significado al concepto de “familia”. Recordar que sin Ustedes y su protección sus hijos corren el riesgo de estar sin escudos frente al mundo creándoles temores irracionales eligiendo en una lucha o volar por la vida. No suprimir la importancia que tienen los hijos en sus vidas, exhortando a los progenitores que abandonen aquellos sentimientos negativos hacia el otro, perdonarse a sí mismo por no haber logrado mantener el proyecto de vida que en su momento compartieron,  reconciliarse con su pasado y centrarse en la construcción de un futuro rodeado de amor para sus hijos.

Buscar un dialogo plural con acuerdos democráticos que permita favorecer en el consenso no solo la sana convivencia y estabilidad de la familia en su nuevo formato, si no también beneficiar a los hijos en su derecho de tener un crecimiento integral. En este sentido se invita a papa y mama vivir con cimientos emocionales sólidos, con la finalidad de crear buenos ciudadanos de lo contrario surge la pregunta ¿qué modelo de humanos van a edificar.

Para finalizar estimado lector enumero algunas recomendaciones, para que padre y madre trabajen en esta transición de la familia.

#No importa lo derrotado e inmune que te encuentres, nadie puede darle a tu hijo lo que necesita, el padre y la madre son únicos e irremplazables.

#Evitar hacer comentarios despectivos del padre o madre ausente.

#Los hijos no son objetos. Lucha por no apropiarte de ellos y sí por su libertad y amor.

#Seguir validando las cosas buenas que ofrecía el progenitor ausente hacía con los hijos

#Los conflictos entre los conyugues no invadan el espacio programados para los hijos.

#Evitar que los hijos hagan alianzas con papa o mama, así como el favoritismo con uno de los hijos.

#Preguntar a los hijos periódicamente como se sienten en esta nueva dinámica familiar.

#Explica a tu hijo que papá y mamá no pueden vivir juntos y que a partir de ahora vivirán en distintas casas.

#Afirma repetidamente a tus hijos que ambos continúan queriéndoles igual o más que antes.

#El padre o la madre que no tenga la custodia podrá verlos siempre que ellos quieran.

#Asegura a tus hijos que ellos no tienen ninguna responsabilidad en el divorcio. Ellos no tienen la «culpa». La responsabilidad es de papá y mamá por igual.

#Facilita la relación de tu hijo con el otro progenitor. Siendo flexible en los horarios de visitas y cediendo en fechas señaladas, contribuirás a que tu hijo mantenga sus referentes emocionales.

• Los hijos seguirán aprendiendo de tu comportamiento. Que tus acciones este en términos de buenos valores y principios, para que tus hijos te respeten.
• Asegura que tus hijos no estén expuestos con personas que no son de tu plena confianza.
• Estar pendiente de sus gustos, se parte de su vida sin invadir demasiado su espacio.
• Estar en constante comunicación con sus intereses y sucesos de sus vidas.
• No descalifiques o ignores cuando platiquen que algo malo les haya sucedido. Sumando a ello, se recomienda llevar a cabo un proceso terapéutico; ya sea individual, familiar y de padres, lo que el terapeuta determine con la finalidad de acompañar en las historias de  los miembros de la familia, con el fin de reescribir en esta transición de crisis emocional significados de seguridad, perdón, pertenencia, afiliación, amor, entre otros. Un lenguaje de valores que armonizara en este nuevo sistema familiar.

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