Xalapa, Ver. La madre de una menor de edad asesinada en Nanchital denunció ante personal de la Comisión Nacional para Prevenir y Erradicar la Violencia contra las Mujeres (CONAVIN), que una empleada de la diputada Mónica Robles, que es periodista, se vale de sus influencias para entorpecer las investigaciones, pues involucran a un familiar.
Gloria Ventura, madre de Vianey Santiago Ventura, asesinada el 2 de octubre en Nanchital, se presentó ante la mesa interinstitucional organizada por la CONAVIN -dependiente de la SEGOB- y las organizaciones defensoras de los derechos de las mujeres para exponer su caso.
La madre identificó a la empleada de Mónica Robles como la reportera, Areli Sosa corresponsal en Nanchital del Diario del Istmo, propieda de la diputada.
Delante de los funcionarios del gobierno federal, dijo que por primera vez contaba con un foro en donde la tomaran en cuenta, pues en Nanchital, y la fiscalía especializada que lleva su caso, en Coatzacoalcos, la corrupción no deja avanzar el caso.
Recordó que su nena, de 16 años, fue obligada a ingerir 35 pastillas abortivas, y murió, no conforme, el agresor la lanzó desde una altura de cuatro metros, y abajo, le echó combustible e intentó incinerarla.
De todo esto -dijo- recayó la sospecha contra quien era su novio, un joven llamado Rafael Sosa, quien también era menor de edad, pero ya cumplió los 18.
Recordó que durante 24 horas buscó a su hija al notar que la noche previa a su muerte, no había llegado a dormir. «Fui a ver al novio, y lo encaré, le exigí saber donde había estado, pues mucha gente me dijo que los habían visto juntos cerca del lugar conocido como El Mirador. El chico me dijo que él no sabía nada de ella, que sólo le había dado unas pastillas para abortar, porque estaba embarazada.
La madre expresó que cuando la niña apareció, en medio de una pira hecha con maleza y thiner, pidió a las autoridades el aseguramiento del novio, pero para esto, una de sus tías, que es periodista, y labora para una de las empresas de la diputada Mónica Robles, presidenta de la Comisión de Equidad y Género del Congreso local, interfirió usando sus influencias con la Policía Ministerial de esa región.
«El novio no fue interrogado, ni detenido ni ni si quiera molestado, el comandante dijo que no, ´que él no podía ser, y con eso se perdió la oportunidad de por lo menos saber si en la ropa o en las manos traía residuos del combustible que empleó para quemar a mi hija, y todo fue por que la periodista defendió a su sobrino», recordó Gloria Ventura.
La madre dijo que durante la mesa, hizo un llamado a la diputada Mónica Robles a ser congruente, y si está enterada de este asunto, intervenir a su favor para que se haga justicia, pues el proceso fue entorpecido por una de sus empleadas abusando de la posición que tiene al laborar en sus periódicos, que tienen mucha influencia en el sur del estado.
«Meses después un policía de la Ministerial me dijo que tras la autopsia, a mi niña le extrajeron 35 pastillas de abortar de su interior, creemos que el chamaco la obligó a tomarlas, por que no quiso hacerse responsable», dice vía telefónica.
En la reunión también acusó la lentitud de la Fiscalía Especializada contra la seguridad Sexual de Coatzacoalcos, en la que está radicada la causa de la menor de edad, «cada vez que vamos, nos hacen dar vueltas, que la MP anda de vacaciones, que no está, que no hay esto… puro darnos largas».
Dijo que espera que el Fiscal Luis Ángel Bravo, que ha demostrado escuchar a las madres de las víctimas, le dé audiencia para señalar su inconformidad con el desempeño de su personal en el sur de Veracruz.
Actualmente, más de 80 mujeres han sido asesinadas en Veracruz, y organizaciones civiles, con el gobierno federal, estudian las situación para pedir al gobierno de Veracruz que aplique acciones de la alerta de género pera frenar esta violencia.
Veracruz, junto con EDOMEX, se encuentra entre los estados con mayor índice de violencia feminicida, sin embargo, en el gobierno de Eruviel Ávila, se decretó alerta para varios municipios, y la violencia ha menguado.
En el gobierno de Javier Duarte de Ochoa, el discurso promulga la defensa de las mujeres, pero en las acciones, no hay avance en investigaciones de feminicidios y el Instituto Veracruzano de las Mujeres se ha convertido un elefante blanco, al igual que los institutos de las mujeres que lo único que hacen son cursos.
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