Coatzacoalcos, Ver.- El sur de Veracruz ha recibido inversiones millonarias en los últimos años en el ramo de petroquímica, como los 5 mil millones de dólares para edificar el complejo del Proyecto Etileno XXI, y ahora se apresta a recibir otra importante suma de recursos por la adjudicación de los campos petroleros Moloacán y Cuchiapa, no obstante, las carreteras de esa zona son un desastre.
Producto de la tercera etapa de la ronda uno, fueron entregados a empresas extranjeras y consorcios nacionales, los dos campos que colindan con el municipio de Coatzacoalcos, pero sus principales vías de acceso por tierra están completamente destruidos por la falta de mantenimiento.
En el caso de los campos para Cuichapa y Moloacán, las carreteras estatales que conducen a ellos, tienen tramos llenos de agujeros y puentes tirados, por lo que se vislumbra un panorama complicado para estos nuevos inversionistas, el panorama que se complica mucho más si se le agrega la inseguridad que, por las malas condiciones de las vialidades, persisten en el sur.
Lo mismo pasó con el proyecto Etileno XXI, que en su mejor etapa generó casi 20 mil fuentes de trabajo fijas para habitantes del sur de Veracruz, de Oaxaca y Tabasco.
Fueron más de 5 mil millones de dólares los destinados a este complejo petroquímico por la sociedad Braskem-Idea, y cercana su fase final, sus ejecutivos sólo pidieron algo al gobierno mexicano y al de Veracruz: mejorar las vías de comunicación.
En esta dinámica, se espera que los consorcios que invertirán en la extracción de crudo, también deban exigir a los tres niveles de gobierno, el reparar las vías de comunicación para dar mayor seguridad a su personal.
Los altos mandos del consorcio esperaban que antes de finalizar la obra, la carretera Coatza-Villa estuviera ampliada en cuatro carriles hasta Nuevo Teapa, y contar con vías de comunicación por tierra adecuadas para la salida del polietileno de baja y alta densidad que será sacado de Nanchital para Monterrey, Estado de México y el puerto de Veracruz.
Pero el proyecto que tiene la SCT, apenas está en estudio de las afectaciones de los derechos de vía, y por lo menos para los siguientes años, no se tiene mucha esperanza de ver cambios a corto plazo. Otra pendiente eran los accesos al complejo en el municipio de Nanchital, obra que le correspondía al gobierno de Veracruz, y no se ha ejecutado.
La producción de esa planta, se estima en 1 millón 50 mil toneladas, el 60 por ciento de esa carga se moverá por ferrocarril y el 40 por ciento por camiones de 28 a 30 toneladas, que precisamente circularán por la Coatza-Villa.
Igual ocurre con los grandes campos a explotar, ambos con un potencial de 100 millones de barriles.
El de Cuichapa, cuenta con un área de 42 kilómetros cuadrados y posee un volumen original de aceite de 452 millones de barriles y 472 millones de pies cúbicos de gas.
Así, mientras los inversionistas no dejan de apostarle al sur, el gobierno del estado agarra parejo y ahora se prepara para encajar otra banderilla sobre los ciudadanos al concesionaria a un privado el manejo y reparación del tramo Las Matas, y se pagaran 7 millones de pesos al mes.
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