Diputados mediocres y corruptos

Le cuento: En Estados Unidos de Norteramérica,  la Cámara de Representantes cuenta con 440 miembros que perciben un salario de entre 174 mil y 193 mil dólares anuales, un promedio de 3 millones 200 mil pesos mexicanos.

Aquí en Mexicalpan de las Tunas, son 500 diputados, es decir, 60 más que en Estados Unidos y reciben, (aclaro, que no devengan), poco más de 3 millones 259 mil pesos, o sea, 59 mil pesos más.

Pero si ello resulta censurable ¿qué le parece que cinco de esa privilegiada casta de legisladores, además de cobrar sus más de 3 millones de pesos, cobren otro milloncejo, ese sí, de plano sin trabajar y sin siquiera tomarse la molestia en disimularlo?

Cabe precisar que cuando un diputado forma parte de alguna comisión, gana lo menos 88 mil pesos mensuales más, por dicha comisión que lo va a distraer de sus tareas legislativas.

Recientemente, luego de varios escándalos de corrupción dentro del Partido Acción Nacional (PAN), creó la Comisión Especial Anticorrupción, para revisar los casos de corrupción, precisamente
entre sus mismos militantes. Advirtió la dirigencia que “no toleraría actos que dañaran al partido”.

Entre los primeros casos que debería investigar, aclarar y sancionar, figuran los de la “chapodiputada”, Lucero Guadalupe Sánchez López; los llamados “Moches” de los diputados federales panistas, el del ex gobernador de Sonora, Guillermo Padres Elías o el de la ex alcaldesa de Monterrey, Margarita Arellanes, y otros más, reservados celosamente por la fiscalía fantasma.

Ante esta simulación el pueblo mexicano tercermundista, subdesarrollado y mediocre, no dice nada y sigue votando por los mismos, priistas, panistas, perredistas y de otros partidistas que solo le cuestan más millones al pueblo.

El 4 de octubre de 2015, Ricardo Anaya Cortés, presidente nacional del blanquiazul, nombró a Luis Felipe Bravo Mena, como titular de dicha comisión y a Ernesto Ruffo, Silvia Garza, Guadalupe Murguia y FAUZI Hamzam Amad, como integrantes de la misma. Lo graciosos es que a la fecha, no ha dado resultado alguno, no hay un solo casoconcluido, no ha emitido acuerdos, resoluciones o sugerencias y, por ende, menos sanciones… y el pueblo callado.