Batalla campal por la presidencia del TSJ

Alberto Sosa Hernández también debe rendir cuentas antes el TSJ o "negociaron su salida?".
- en Foro libre
Federico Hinojosa/
Distractores como el caso del repudiado Javier Duarte de Ochoa, el Alibaba veracruzano y sus más de 40 ladrones (as), a lo que se han sumado los bloqueos en las principales ciudades del Estado, que ha trascendido las fronteras de nuestro país, entre otros sucesos, han quitado no precisamente importancia, pero si, luminarias a la sucesión en la presidencia del Poder Judicial de Veracruz.

Es un hecho, que incluso, por la conocida complicidad, que entre el propio Duarte de Ochoa y Alberto Sosa Hernández, este último, carezca ya en forma absoluta, de credibilidad, si es que alguna vez la tuvo.

El asunto de los 2,500 millones de pesos, que se dice prestó a Duarte de Ochoa, le han traído muchos problemas económicos a la parte más débil del Poder Judicial, la empleomanía, lo que ha sido bien aprovechado, por algunos Magistrados, para aparte de llevar agua a su molino, convertirse en supuestos interesados en ayudar al grupo vulnerable, en confabulación con algunos lidercillos, que solo esperan la oportunidad para también manifestarse como defensores de las causas nobles.

Del cien por ciento de los Magistrados, no dude Usted, que un 90, aspire a ser el sucesor del tristemente célebre, Alberto Sosa Hernández.

De ellos, de los que quieren ser, desde luego, descarte Usted, a Reynaldo Madruga Picazzo y por supuesto a otro cómplice, de Sosa Hernández, enriquecido al igual que el presidente saliente, a más no poder, Raúl Pimentel Murrieta.

Surgieron así las posibilidades para personas como Alejandro Hernández Viveros, Irma Dinora Guevara, Andrés Cruz Ibarra y Daniel Ruiz.

Se preguntará Usted, porque aquí no se menciona a Yolanda Cecilia Castañeda Palmeros o algún otro. La señora del lenguaje florido y creyente de ser merecedora de los mejores elogios, que se ha escudado en el género para aspirar a la presidencia, por sus acciones y díceres, no la soportan ni sus compañeras de sexo, como Concepción Flores, Sara Hilda Beltrán y hasta una de las ultimas ahijadas de Duarte, como lo es Patricia Montelongo.

Lo peor es que se sabe, que su labor ha estado encaminada, según ella, obedeciendo a indicaciones del Gobernador Electo, Miguel Ángel Yunes, para abrir brecha a quien se dice será el favorecido con el dedazo, para convertirse en el próximo presidente del Poder Judicial y del Consejo de la Judicatura, Edel Álvarez.

De ser todo esto cierto, la Castañeda, no solo estaría traicionando a sus congéneres, sino que al final, tendría que aceptar que solo ha sido utilizada como ella misma ha empleado a algunos funcionarios menores del propio tribunal.

Decir de Sosa Hernández, que hizo algo positivo en el Tribunal Superior de Justicia, simplemente es mentir. No ha sido solamente el manejo tendencioso de los recursos económicos lo que se le puede reclamar al de Lerdo de Tejada, no, junto con Raúl Pimentel Murrieta se apoderaron de los Distritos Judiciales, a través de la designación de Jueces, Secretarios de Acuerdos, Defensores de Oficio, tanto menores, como de Primera Instancia.

Muchos de ellos, terminaron siendo sus compadres y en el caso de las damas, también varias, hicieron valer sus influencias físicas.

Así se encontrará Usted con que dentro de la plantilla de Jueces, existen varios juniors, algunos hijos, otros sobrinos, yernos o cuñados de Magistrados también.

En este sentido, destacan no precisamente  por sus conocimientos y honestidad, Jueces como Uriel Domínguez Colio, hermano de la que fuera vocera de Javier Duarte, Gina Domínguez; aparecen también juzgadores como el amanerado Laurentino Sosa Capistran y ahora hasta la hija de este bisexual, Aleyda Sosa.

Laurentino, aparte de sus tendencias, que lo han llevado a ser protagonista de la Jaula de las Locas, en varios Distritos Judiciales, negociador completo, de los fallos en asuntos a su cargo, es el mismo, que fue sorprendido en el sospechoso traslado de varios expedientes, que llevaba en su vehículo.

Aleyda, era la juez de diez, porque diez mil pesos era la cantidad mínima que recibía por los Autos de Libertad.

Otro caso destacado es del actual Juez de Panuco, Roberto Garcés, al que en Zongolica, abogados y sociedad rechazaron y en su momento le habían impedido tomar posesión del Juzgado, habiendo necesidad de que su compadre, Alberto Sosa, ordenara se le apoyara por todos los medios.

Los instructivos en su contra, jamás prosperaron.

Ahora, antes de irse, Sosa Hernández, premió a su ahijado, el hijo de Roberto Garcés, para ubicarlo también como Juez de Primera Instancia.

Otro caso que por años ha sido tema de reclamo por la sociedad es el de Ricardo Jaramillo Palomino, el llamado “Papi”, una fábrica de hacer dinero establece en cada juzgado en que le toca despachar.

Su ignorancia jurídica, tiene antítesis en la negociación de los asuntos, en los que es un verdadero maestro.

La protección le viene, desde la hermandad, en el caso de algún reclamo, su sanción, se circunscribe, a cambiarlo de Distrito.

Hace algunas semanas, fue conocido el caso, del asesinato, descuartizamiento, del líder de la Barra de Abogados de Coatzacoalcos. La noticia tuvo alcance nacional, se dijo que los malos estaban atrás del asunto, pero que iban también sobre elementos Ministeriales de la región, al igual que sobre el Juez Guillermo Vargas y su Secretario.

Vargas aparte de que se ha tornado millonario en su paso por el Poder Judicial, hizo de Coatzacoalcos, una mina de oro, no vacilando en torcer la justicia, pero en esta ocasión la traición lo quemaba y el miedo imperó, saliendo de huida hacia la capital del Estado, en compañía de su secretario para pedir auxilio a Sosa Hernández. A valores entendidos Alberto Sosa, autorizó de inmediato su cambio y no solo eso, lo tornó Juez de Juicio Oral.

Ejemplos sobran, como son el caso de un Juez de apellido García en Córdoba, ahijado de su jefe de prensa, así como de otro juzgador de apellido Palafox, hijo de Angélica Palafox, la secretaria del Tribunal Superior de Justicia.

Adrian Romero, en Veracruz, es otro de los casos especiales, se dice que es hijo de un Magistrado Federal y ha hecho del juzgado a su cargo, el palacio de las doncellas, salvo sus consentidos, tienen acceso a su oficina, el resto de los mortales, deben pasar hasta dos o tres aduanas para conocer si el Señorito, los puede o quiere atender.

Si son personas, de vestimenta humilde, descartado está que puedan conocer al Juez Romero.

Cuanto tienes, cuanto vales, impera en la mayoría de los juzgados de Veracruz, con sus contadas excepciones, por donde quiera que se le busque, el Poder Judicial hiede.

Mientras Sosa Hernández y sus correligionarios se han dado vida de reyes, las oficinas de los juzgados del mismo Tribunal, muestran carencias en recursos materiales y una explotación absoluta de la mayoría de los empleados. Instrumentos de trabajo inservibles, falta de papel, son los aspectos más evidentes del porque los empleados en ocasiones deben cubrir de su peculio esos requerimientos.

Los casos de los Juzgados de lo Familiar, recién creados, se han convertido, no solo en una muestra evidente de la corrupción, como ocurre con el amanerado Juez Octavo, en el Puerto de Veracruz. El cuanto tienes, cuanto vales, es una máxima imperativa.

En los legendarios juzgados de Pacho Viejo, donde las causas de personajes de la política, han sido tramitados, es frecuente, la desaparición de expedientes comprometedores, ante la complicidad, de los Consejeros del Poder Judicial y por supuesto del todavía, por unas horas más, presidente.

Pero no solo los jueces son sinónimo de corrupción, el negocio grande tanto en juzgados como en el Tribunal, nos referimos a las Salas, lo llevan los y las Secretarias de Acuerdos. Casos como el del hampón nucamendi, Hernán, el mismo que huyó de Coatzacoalcos, junto con Guillermo Vargas, son apenas dos casos que nos muestran el enriquecimiento “explicable” al que han llegado.

En las Salas del Tribunal, basta poner un ejemplo, como es el caso, del bisexual también, Francisco Hernández Lima,  quien con el manejo de algunos malos e ignorantes proyectistas se ha enriquecido, vendiendo la justicia al mejor postor, ante la complacencia de quienes debían cuidar que la justicia impere.

Desde luego, son numerosos los casos, en que los hijos de Magistrados se han encumbrado sin mayor trámite en las titularidades de juzgados y secretarías, por lo que los apellidos Ruiz, Pimentel, Cabrera, son algunos a citarse.

Podríamos pasarnos kilómetros, de papel, citando casos en especial, pero nos concretaremos a señalar que en la ruta final por la presidencia del Tribunal, hasta las primeras horas de este martes 29 de noviembre, se encontraban el Consejero Andrés Cruz Ibarra y el candidato que muchos de sus compañeros repudian y temen, Edel Álvarez Peña.

A Cruz Ibarra, el puesto lo ha cambiado, con unos meses en el Consejo, el mareo le ha llegado y ahora no tiene amigos, le sobran intereses, construyendo ya un bloque encaminado a favorecer a quienes operan para él.

En el caso de Edel Álvarez Peña, ha tenido que luchar contra el odio oculto y las manifiestas críticas, por haber sido favorecido sin tener carrera judicial alguna.

Como ya se dijo antes, la reina de los pendejos, que curiosamente cerró su venenosa boquita, ha cumplido su cometido, operando en pro del empresario periodista que se dice, cuenta con la bendición del que llega, solo ellos quedan en la brega, pues no se ve quien pueda ubicarse como un tercero en discordia.

Una cosa es cierta, ninguno de los dos, tiene la capacidad para sacar adelante al Poder Judicial de los problemas que enfrenta, además de que después de la elección, el ganador quedará comprometido a más no poder por aquello de los votos que les serán concedidos.

Jueces y Magistrados, serán los únicos favorecidos como ha ocurrido siempre. Los verdaderos trabajadores y funcionarios de término medio, que son los que sostienen verdaderamente al Poder Judicial, seguirán en medio de las carencias. Las direcciones, juzgados menores y los centros alternativos de solución de conflictos, estarán dedicados a los Juniors y los justiciables, los gobernados, esquilmados.

 

Comentarios

  1. Estoy leyendo la nota… se ve que el que la escribió es una persona muy culta por las palabras que usa… se merece el premio nacional de periodismo….

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