Xalapa, Ver.- Al interior de los colectivos de madres de desaparecidos, reina la inconformidad y la decepción contra el senador Fernando Yunes Márquez, quien ya anunció que pedirá licencia para ir por la candidatura del PAN a la alcaldía de Veracruz, en el proceso electoral que acaba de iniciar el pasado 17 de febrero.
Su salida, por ejemplo, implica que dejará tirados los trabajos para la aprobación de la Nueva Ley para desaparecidos, que en estos momentos está en la congeladora del Senado de la República.
Ni el senador veracruzano, ni los otros parlamentarios de su partido han demostrado interés en los últimos meses por sacar ese tema de la agenda.
Los que han estado pendientes, desde San Lázaro, son los diputados de Morena; para el neopanista Yunes Márquez sólo resultó un tema rentable para aportar votos a la campaña de su papá, el ahora gobernador de Veracruz, Miguel Ángel Yunes Linares.
“Nos tiene algo contrariados y con menos esperanza el anuncio hecho por el senador Yunes Márquez, pues él era uno de los más proactivos en el tema de los desaparecidos de Veracruz, y ahora resulta que se va por un nuevo cargo, eso nos lastima”, dijo una de las representantes de colectivos en Veracruz, que pidió anonimato ante el recelo que ha demostrado la familia Yunes.
Otras integrantes han dicho que resulta preocupante que el tema de los desaparecidos sea empleado por los partidos políticos como una bandera electoral,pues usando el dolor de las madres, levantan ámpula en la sociedad y cosechan el voto del resentimiento.
Ciertamente, el gobierno de Javier Duarte de Ochoa se caracterizó por el incremento exponencial de las cifras de personas ausentes. A nivel nacional, Veracruz ocupa los primeros lugares en desapariciones por particulares y el primero en desaparición forzada, que es la cometida por agentes de la ley.
En los inicios de la campaña para gobernador de Miguel Ángel Yunes Linares, Fernando Yunes le organizó a su padre un encuentro con madres de desaparecidos en el puerto de Coatzacoalcos, el cual se efectuó en un importante hotel de la zona costera.
En ese encuentro, Yunes Márquez dijo, casi llorando, que sentía el dolor de las madres, y que desde el Senado, se comprometía a tomar el tema de la nueva Ley de Desaparecidos como una consigna personal.
Esa legislación, por ejemplo, supone castigos más fuertes a los particulares que realicen un acto para desaparecer a alguien, lo mismo para las autoridades, igualmente, flexibiliza la actuación de las autoridades cuando la persona es declarada ausente para que la familia pueda acceder a sus bienes, un drama diario que adolscen las madres de Veracruzanos y esposas de hombres productivos que dejan sus propiedades o cuentas bancarias sin poder ser ocupadas para tareas mismas de la búsqueda.
El ahora gobernador también se reunió con integrantes de algunos colectivos, en donde expresó que conocía el dolor causado por el mal gobierno de Javier Duarte de Ochoa a raíz de los comentarios efectuados por su hijo, el senador, y que no se imaginaba tal drama, ofreciendo su palabra de que en su mandato, se les respetaría y se les apoyaría en todo para dar con sus seres queridos.
Sin embargo, en la última reunión entre madres de colectivos y el antes abogado de Yunes Linares, Jorge Winckler, éste las dejó plantadas por más de dos horas, lo que las irritó y tuvieron que entrar a la Fiscalía por la fuerza.
Dentro de la reunión, el Fiscal Winckler se portó déspota y distante con las mujeres, “que poco aguanten tienen estos nuevos gobernantes”, dijo la vocera de Solecito, Lucía de Los Ángeles Díaz Henao ante el comportamiento del abogado yunista. También lamentó que Yunes Linares no haya honrado su palabra de estar presente en todas las reuniones de madres con autoridades, como ofreció en campaña.
De ser candidato del PAN al gobierno municipal de Veracruz, Fernando Yunes iría por su segundo puesto de elección popular que deja a medias. Pues antes fue diputado local, puesto que ganó con el voto popular y dejó tirado por irse a la campaña al Senado, que ahora pretende dejar a medias para ir por la alcaldía jarocha, que actualmente está en manos del PRI, con Ramón Poo Gill, hijo de Ramón Poo Ulibarri, ex alcalde veracruzano, y ex colaborador de Dante Delgado Ranauro, a quienes Yunes Linares encarceló en los tiempos de Patricio Chirinos Calero.
Pobre pendejo este que voto a favor del gasolinazo, piensa que va a ser gobernador ni que fuera Rusia, para que se vuelva Veracruz en una monarquia absoluta, de los YUNES, papa gobernador, hijo gobernador, el otro alcalde, no pues si que quiere hacer su monarquia, ya sean rojos o azules o sea PRIAN pero falta una cosa que el pueblo quiera, por que con estas promesas que ya cumpliste, de correr gente, de cimbrar a mexico, de meter a Duarte a la cárcel y sus secuaces, camaras de seguridad, drones, empleo, inseguridad, no pues Veracruz esta muy contento contigo, por mitómano pobres pendejos ya mamaron mucho tiempo de la ubre hoy tendrán que devolver todo lo que es de los veracruzanos… Lo que se robaron.
ay sí, ay sí…
chusma chusma….
prrrrrrt