Francisco De Luna / Xalapa, Ver.-Los integrantes de la Red Animalista y Ambientalista de Veracruz (RAAV), exigieron al diputado Daniel Olmos Barradas, no presentar la iniciativa para que se permitan las vaquilladas y peleas de gallos en la entidad.
Esta propuesta fue la que el gobernador, Miguel Ángel Yunes Linares, evitó publicar en la Gaceta Oficial del Estado y no entró en vigor, señalaron Organizaciones por los derechos de los animales en Veracruz.
La integrante del “Movimiento Conciencia”, Isis Guillén Rasgado, afirmó que ha quedado demostrado que son eventos que lastiman a la sociedad, pues someten a grave sufrimiento a los animales y por lo tanto no es un espectáculo que sirva a un estado en crisis como la entidad.
Claudia Leonardo, de la Red Animalista, expuso que están en contra de que reaviven la iniciativa y por ello exhortó a los legisladores que no voten por el planteamiento, al considerar que se atenta y alienta al maltrato animal.
Por esa razón dijeron que los diputados deben responder a las demandas de la población que representan y no a sus intereses particulares.
“Convocamos a todos los legisladores a que, más allá de sus intereses personales e inclinaciones perversas por este tipo de prácticas, piensen en el futuro de sus hijos y de aquellos que han confiado en ellos como representantes públicos. Un animal no puede defenderse”.
Los activistas rechazaron este tipo de costumbres que generan un entorno violento en la entidad, y añadieron que ni siquiera son actividades propias de la cultura mexicana, “apoyamos las tradiciones pero que estén libres de violencia. Veracruz es un estado rico en tradiciones, ayer se tuvo un evento de jarochos, como pueden ver, los veracruzanos no queremos más tradiciones con violencia”.
Finalmente mostraron su preocupación al explicar que, en un momento de grave crisis de seguridad en la entidad, se busque reforzar mensajes violentos como los que mandan las peleas de gallos y las vaquilladas, que continuarán poniendo en riesgo a la población, pues los especialistas advierten que, en sus espectadores, podrían generar expresiones de violencia también contra otras personas.
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