Tuxtepec, Oax.-Hasta antes del escándalo de las fosas en su rancho San Ángel, en Playa Vicente, el empresario Humberto Andrade Salinas, Alias Cacahuate, presumía su cercanía con Leonardo Hernández, El Brujo o El Doctor, durante muchos años, capo de capos en la región de Playa y Tuxtepec.
El Brujo llegó al poder del narco en esa zona a raíz de la caída Marcelo Arroniz Serrano, El Chelín o El Alacrán, asesinado a tiros en 2005 por rivales.
Bajo las siglas del Cártel del Golfo, y en alianza con otros grupos de la delincuencia, El Brujo armó un imperio desde Playa Vicente hasta Tuxtepec, donde era amo y señor de toda actividad a al margen de la ley.
Era un capo distinto a los demás, aplicaba la violencia, pero no cometía excesos, de carácter afable, y trato amable, ser déspota no lo distinguía, le que le ganó la simpatía de muchos hombres poderosos de la región, entre ellos El Cacahuate, quien hasta entonces, presumía un supuesto compadrazgo con el ex amo y señor de la Cuenca del Papaloapan.
Las estadísticas incluso no engañan, durante los años del reinado de El Brujo en Playa, los indices de homicidios en ese municipio, son imperceptibles.
Lo que cambió con su asesinato, en 2017, en un palenque supuestamente a manos de un grupo rival.
Con el hallazgo de las fosas, en Playa Vicente, en el pueblo comentan la gran cercanía del copropietario del predio con el finado capo.
Trascendió que las autoridades, especialmente las federales, investigan las finanzas tanto de alias Cacahuate, como de su padre, Humberto Andrade Ajhua, quien se deslindó de lo ocurrido en su propiedad en entrevista con periodistas el pasado lunes.
Las autoridades están muy interesadas en saber cómo se facturaba todo el ganado robado en la región, y que terminó en manos del grupo Los Piñitas de Azueta.
El gobierno tiene muy claro que en algún lugar, con el beneficio de encumbrados, se tuvo que realizar esa facturación y lavado de activos.
Trascendió que mientras el famoso Taralila tuvo que dar la cara, solito, a sus 85 años, a los medios de comunicación que llegaron a entrevistarlo a la entrada de su propiedad, El Rancho San Ángel, acompañado de la Fiscalía y la Guardia Nacional, su hijo, simplemente salió corriendo para no responder a la prensa, dejando atrás a su padre quien intentó lavar el nombre de la familia con algunas declaraciones.
«Era un rancho abandonado, sin un cuidador, acá solo se venía una vez al mes, cuando se bañaba el ganado», dijo. «Desconozco que pasaba por acá», afirmó.
Incluso, Taralila aventuró que sus caporales alguna vez le dijeron que era habitual que las personas ingresaran «a echar novio».
En Playa Vicente actualmente opera una unidad de la Guardia Nacional que realiza tareas de inteligencia en coordinación con la Guardia Nacional.
Muchos ganaderos y potentados de la zona, están en la mira de las autoridades federales que llegaron a poner orden, a raíz de la escandalosa cifra de personas desaparecidas en esos municipios, la mayoría en un contexto de violencia.
Humberto Andrade Salim, Alias Cacahuate, hijo de Humberto Andrade Ajhua, Taralila, dueños del rancho San Ángel en Playa Vicente.
Tiene cara de ? CACAHUATE
Pues llendose a la sombra para siempre ese GENARO GARCIA LUNA, qué pierde ya si entre lo que despotrica sale el nombre de este mirey, que el mirey mejor use una de esas fosas para enterrarse para siempre.
Ese viejo está coludido con todos esos ladrones
Tiene ganado en toda esa región de playa Vicente, en la ganadera están todos los ladrones.