Ante violencia en región de Playa Vicente surge otro grupo de autodefensas comandados por Said Viveros alias El Cuate

En el sur también aparece otro grupo de presuntas autodefensas procedentes del estado de Guerrero, ante la falta de resultados de SSP para pacificar la región
- en Sucesos
Playa Vicente, Ver.- Un grupo delictivo procedente de Guerrero, y que pretende montar operaciones en los límites de Oaxaca y Veracruz, amenaza la paz que se ha logrado con mucho trabajo, sangre y lágrimas en Playa Vicente y municipios vecinos.
Sin comandados por Said Viveros Castro, alias El Cuate, quien cuenta con una amplia carreta delictiva en los estados de Veracruz y Oaxaca, y ahora pretende desestabilizar el trabajo que ha realizado el gobierno del Estatal para abatir a la delincuencia en esa región.
Datos de inteligencia de la Secretaría de la Defensa Nacional y de la Secretaría de Marina, ubican a El Cuate como cabeza de un grupo de gavilleros avenciados en el poblado de Benito Juárez, en Santiago Sochiapan, que en el pasado fueron aliados de grupos delictivos que encabezó Leonardo Hernández, El Brujo o el Doctor; y Reynaldo López Patiño, el Pelón de Abasolo.
En diciembre de 2014, durante una convivencia navideña en el  poblado de Benito Juárez, en la que estaba presente El Brujo, al calor de las copas, hubo una riña entre el grupo de pistoleros de Benito Juárez y la gente de el capo El Brujo, salieron a relucir las pistolas, se dieron disparos, y ahí fue asesinado el hermano gemelo de Said Viveros Castro.
Después de ese problema, perseguidos por los enemigos tras el pleito donde murió su gemelo, Said Viveros Castro, se marchó al estado de Guerrero, al municipio de Petatlán, y ahí se enlistó en una guerra en la que participaron varios grupos delictivos de narcotráfico para expulsar a los Caballeros Templarios.
En esas fechas, la pelea fue entre los Templarios contra los capos locales Salvador Chava Granados, Edilberto El Gavilán Bravo Barragán y Crescenciano El Chano Arreola Salto, quienes contaban con el respaldo del Cártel de Jalisco Nueva Generación.
En medio de esa guerra, Viveros Castro y sus pistoleros, sembraron el terror y realizaron diversas actividades delictivas en esa región que durante muchos meses fue número uno en homicidios y secuestros, y tuvo que ser pacificada por autoridades federales.
En abril del 2018, es asesinado en Playa Vicente Leonardo Hernández, El Brujo, y todo su poderío se viene a abajo. Entran en la escena otros generadores de violencia, los hermanos Jacinto y Alberto Piña, así como su lugar teniente, Reynaldo Patiño, El Pelón de Abasolo del Valle, un fracasado jinete de jaripeo metido a sicario.
Tras la caida de El Brujo, Viveros Castro regresa a Veracruz gracias a sus relaciones con Reynaldo Patiño, El Pelón, y cuenta con su protección, pero algo pasa en el camino, y se pelean, y en julio del 2019, El Pelón de Abasolo del Valle arremete contra la familia de Viveros Castro,y levanta y desaparece a su hermano Alejandro Viveros Castro, y al papá de ambos, Pedro Viveros Monge, hasta la fecha desaparecidos.
En esas mismas fechas, El Pelón intentó asesinar a Said Viveros Castro en distintas ocasiones, por lo cual tuvo que volver a exiliarse.
El ataque a la familia Viveros Castro fue tomado como un gran agravio por parte de los vecinos de la zona, pues en la memoria persiste que Pedro Viveros era un hombre de honor y de palabra, amante de los buenos caballos, por lo cual era ampliamente respetado, lo que contrasta diametralmente con las actividades de alias El Cuate.
En enero del 2020, el gobierno de Veracruz lanza la operación Playa Vicente tras la ola de desapariciones que realiza el Pelón de Abasolo del Valle y Los Piñas.
Por el alza de delitos que cometía el CJNG, que lastimaban a toda la sociedad, sobre todo por el secuestro y el despojo, el gobierno de Veracruz encabeza una dura cacería contra el grupo criminal, hasta sacarlos de Playa Vicente y de  los municipios cercanos.
En esos momentos, empresarios y ganaderos de otros municipios muestran simpatía por la gente de Benito Juárez, pero cuando notaron el cambio drástico, y que iban por el rumbo de los de otros delincuente, les dieron la espalda y poco a poco se han ido quedando solos.
Así, Said Viveros comanda a un grupo de pistoleros, la mayoría de Guerrero, con quienes dice encabezar autodefensas, pero en realidad solo esperaron a que el Gobierno y la Fuerza Civil limpiara los pueblos de integrantes del CJNG, para comenzar sus intentos por alzarse como un capo local, para que se moviera droga y comenzar a realizar todo lo que hacía el Cartel de Jalisco con el tema de las extorsiones.
Sutilmente, ganaderos y empresarios de Playa Vicente y Sochiapa comenzaron a ser visitados por este personaje para que le entregaran fuertes sumas de dinero a cambio de protección, y de que no fueran molestados en sus propiedades, y pudieran trabajar en paz. 
Las visitas las realizaba acompañado de «pistoleros» traídos de Guerrero que supuestamente gozan de experiencia en guerras por haber estado en los enfrentamientos del 2014 contra Los Templarios.
Además, en Benito Juárez manipula a campesinos e indígenas a los que no les paga por colgarse un rifle y aparentar que son pistoleros para sus luchas  y son usados para su objetivo: enriquecerse e incrementar su patrimonio.
Los hombres de trabajo y productores comenzaron a ver que los esfuerzos realizados por las autoridades para restablecer la paz, se pueden ir abajo, pues constantemente reciben llamadas de María López, alias «La Profesora», quien es identificada en ese grupo, como una persona conflictiva que se la pasa acarreando chismes y cizaña entre las autoridades y pobladores.
La Profesora es respaldada por otro lugar teniente, alias Cucho, quienes son usados para levantar el dinero de las cuotas, así como para llevar y traer mensajes de amenazas para amedrentar a los empresarios y ganaderos. Además, en redes sociales hay reportes de que sus hijos están en el grupo de Viveros Castro.
La información con la cual ya cuenta el gobierno, es que el grupo de Said Viveros ya tiene un gran arsenal de grueso calibre, incluyendo explosivos y lanza granadas.
Así como el gobierno de Veracruz acaba de decir que en la zona alta del estado, en la colindancia con Puebla, hay grupos que se hacen llamar autodefensas, y son criminales disfrazados, en Playa Vicente estos personajes navegan con esa bandera con la firme intención de volver a descomponer la zona para que haya trafico de drogas y hechos delictivos.

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