Como hemos observado en estos dos años de la operación en el poder de los funcionarios emanados del partido Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), quedó en claro que Andrés Manuel López Obrador sólo creo un organismo político para poder llegar a la presidencia de la República, pero que en los hechos, no ha representado el CAMBIO que los mexicanos y veracruzanos esperaban.
Un breve análisis de la actuación de Cuitláhuac García Jiménez revela que no existe la más mínima voluntad política para que cumplan con las promesas de campaña y crece el descontento ciudadano por la actuación de quien juró que representaría dignamente al estado y su principal compromiso sería el combate a la corrupción.
El tráfico de influencias, nepotismo, desvío de recursos para enriquecimiento ilícito, uso electoral, negocios al amparo del poder, no solo se registra en el ámbito federal, también en el estatal y en la mayor parte de las dependencias públicas, legislativo, judicial. Los MORENOS son la mayoría unos auténticos delincuentes que usaron las siglas de un partido para ganar sufragios, pero al llegar, se evidenciaron tal como son.
Llamó atención la publicación de Plumas Libres que desnuda la larga lista de parientes del presidente de la Junta de Coordinación Política de la Legislatura en representación de MORENA el flamante Juan Javier Gómez Cazarín. Al menos 8 en esta primera entrega, pero hay mas.
El escándalo inicia cuando el diputado de MORENA por Medellín Magdaleno Rosales, denuncia que por negarse a ser extorsionado por el coordinador de Comunicación Social de la Legislatura Aldo Valerio Zavala, al que le exigían 10 mil pesos mensuales para salir en las publicaciones propiedad de Valerio, filtran que su hijo cobra en la nómina del organismo.
Magdaleno Rosales destapa la cloaca y denuncia que existen legisladores de MORENA que tienen hermanos, sobrinos, hijos, amantes, hasta a sus papás y mamás cobrando en la nómina del organismo.
El primero en negarlo fue Juan Javier Gómez Cazarín que fiel a su costumbre, con un cinismo bárbaro y descarado, dijo que él no tenía parientes cobrando en la nómina. Y más tardó en negarlo, que en descubrirse que tiene a un primo y a una sobrina cobrando más de 20 mil pesos mensuales y de aviadores.
La investigación breve reveló que su primo Juan Pablo Cazarín Nieves cobra auxiliar Operativo, por el que percibe un salario de $25 mil pesos. Prácticamente, es aviador porque aunque cobra en el organismo, Cazarín lo mantiene realizando actividades políticas para MORENA. Él mismo, lo anuncia en sus redes sociales y presume imágenes con su pariente.
La otra es su prima hermana de nombre Emilenis Gómez Vázquez y cobra en la nómina de la Coordinación de Comunicación Social área que opera Aldo Valerio Zamudio, otro funcionario, cuya actuación, merece un análisis detallado y por aparte. Hay mucho, mucho de donde señalar.
El peor caso del nepotismo de Juan Javier Gómez Cazarín, es el de su cómodo hermano Luis Alberto Gómez Cazarín, recomendado como director de telebachillerato en Jaltipan, sur de Veracruz. Con el aval de Zenyazen Escobar García secretario de la SEV, el hermano del diputado cobra 45 mil pesos en ese cargo y lo que es peor, también cobra como director de Plantel C, con la clave 005, en Zapoapan de Cabaña.
Zenyazen Escobar secretario de la SEV le tuvo que entregar estas dos plazas al hermano de Cazarín, dentro del pacto que ambos tienen para cerrar filas en la operación a favor de Cuitláhuac García Jiménez que sueña con heredarle la silla a su amigo íntimo, que a su vez, está enfrentado a Eric Cisneros Secretario de Gobierno, ambos tienen la misma aspiración.
Ninguna de las operaciones de Cazarín en la legislatura ha sido gratis. Está visto que le cobra caro los favores a Cuitláhuac García y a Zenyazen Escobar, que por cierto, ambos se quedaron callados ante esta situación y el muy cínico de Cuitláhuac García salió otra vez con la misma historia de los 500 aviadores detectados en la SEV, mismos que ni él ni su amigo se han atrevido a denunciar.
Samuel Márquez Cazarín primo hermano del diputado que cobra como delegado de tránsito en Hueyapan de Ocampo y Rubén Márquez Gómez, otro primo hermano que cobra como jefe de Hacienda en Hueyapan de Ocampo, son cargos que evidentemente, le permiten al legislador morenista, hacerse de recursos para financiar la campaña de su padre Juan Yona Gómez que busca ser el próximo alcalde por Hueyapan de Ocampo y para él mismo pues busca ser candidato en la zona de los Tuxtlas.
Cazarín aprovechó su cargo no solo para colocar a su familia, también para ejercer presión y lograr espacios en otros ayuntamientos donde colocó gente que le sirve, como el caso del tesorero de Hueyapan de Ocampo donde mantiene al tesorero Valentín Fernández Prieto desviando recursos para financiar campaña de su papito.
Otro caso lo tenemos en el municipio de Actopan donde Cazarín y sus cómplices evitaron que el alcalde suplente José Alfredo López Carreto, tomara protesta y apoyaron la llegada de un regidor de Movimiento Ciudadano que se prestó a las componendas de estos bandidos que usan sus cargos para robar descaradamente.
Con el aval del alcalde espurio Eduardo Carranza, Cazarín impuso al tesorero en Actopan, su nombre es José Jaime Parres Moreno, también tiene nexos familiares. Por si no fuera suficiente, también impuso a Juan Pablo Casas Blancas como contralor interno y a Luis Antonio Rivera Solís como director de Obras Públicas.
No nos pregunten para quién están siendo las obras que se están ejecutando en Actopan. En efecto, todas son para las constructoras de Juan Javier Gómez Cazarin, todo esto, con la complicidad de la diputada por el distrito María López Callejas que se apunta para ser la próxima candidata de MORENA a la alcaldía de este municipio.
La lista de hermanos, primos, cuñadas, sobrinos de Juan Javier Gómez Cazarín cobrando en la nómina en diversas áreas del gobierno es mayor a 8 personas, por el momento, son los primeros que podemos comprobar con evidencias reales. Este pequeño y breve repaso del nepotismo y la brutal corrupción con la que opera Juan Javier Gómez Cazarín, es apenas la punta de la madeja que deja al descubierto como Andrés Manuel López Obrador y MORENA, colocaron en el estado de Veracruz a personas de nula moral, corruptos hasta la médula y con una ambición desmedida de poder y recursos.
Será por eso que a casi 2 años en el poder, no se vislumbra ninguna actuación diferente de funcionarios estatales, legisladores locales, federales, senadores y el gabinete completo de la Cuarta Transformación iniciando por el mismo Andrés Manuel López Obrador cuyos hijos se enriquecen rápidamente a costa de los impuestos que pagamos los mexicanos.
MORENA se quedó una vez más con el CAMBIO en la bolsa y evidentemente solo el fraude y la operación de votos con recursos públicos y los que aportan los grupos delincuenciales que entregan millonarias sumas en campañas, hará que ratifiquen sus triunfos electorales del 2018.
Nos quedó claro que los electores en México castigaron en el 2018 al PRI por la brutal corrupción con la que operó Enrique Peña Nieto, su gabinete y los gobernadores emanados del mismo organismo. En las elecciones del próximo año, es probable que el voto de castigo ahora sea en contra de AMLO y su partido MORENA, porque en los hechos, actúan igual que los priistas. Ya se percibe una decepción grande y un hartazgo generalizado de la gente ante los escándalos que están siendo documentados en los medios de comunicación.
El partido en el poder tuvo una gran oportunidad y la perdió. A estas alturas, la suerte ya está echada y viene un voto de castigo grande para MORENA y su mesías tropical y todo lo que ellos representan.
Al tiempo.
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