Por José Rojas/Veracruz, Ver.-/ La mañana de este jueves, personas que paseaban por el boulevard Manuel Ávila Camacho descubrieron el cadáver de un hombre, que flotaba a la orilla de la playa Regatas de esta ciudad y puerto, donde las corporaciones policiacas montaron un operativo aparatoso y exagerado.
El cuerpo sin vida correspondía a un masculino delgado, que parecía tener 50 a 60 años, vestía camisa blanca, pantalón azul marino y sandalias, que las mismas olas arrojaron sobre la arena entre las calles Mariano Escobedo y Francisco Hernández y Hernández de la colonia Ricardo Flores Magón.
Los testigos, entre turistas y algunos deportistas locales, realizaron llamadas a la Central de Emergencias 911 para avisar del hallazgo, al igual que los guardias de seguridad de la empresa APIVER que realizan vigilancia en la Plaza del Migrante.
Entonces llegaron salvavidas de Protección Civil Municipal, pero confirmaron que ya no tenía signos vitales, y vecinos del lugar comentaron que todavía ayer lo vieron tomando por la tarde, que lloraba y decía que le había robado su maleta con sus posesiones.
La víctima tenía el aspecto de una persona en situación de calle, se desconoce su identidad ya que no encontraron entre sus ropas algún documento que permitiera su previo reconocimiento, tenía algunos días por esa zona y presumen que llegó de otro municipio o estado.
El reporte movilizó a oficiales de la Policía Municipal, Policía Naval, Policía Estatal, Fuerza Civil y Guardia Nacional, que acordonaron el área con cintas amarillas hasta arriba del boulevard Ávila Camacho, frente al hotel Royalty, lo que llamó más la atención del hecho.
Varios minutos más tarde se presentaron los peritos criminalistas de la Fiscalía Regional Zona Centro Veracruz para efectuar la inspección de campo, recoger indicios y el levantamiento del cadáver con un grupo de la Policía Ministerial.
El cuerpo fue trasladado por una carroza funeraria por el personal Médico Forense para la necropsia de ley, y permanece hasta este momento en calidad de desconocido, en espera que comparezcan sus familiares y reclamen sus restos.
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