Por José Rojas/Veracruz, Ver.- Un numeroso grupo de vecinos de la colonia Lomas 4 de Río Medio realizaron una marcha porque Policía Naval dejó libre a Eduardo T. B., a pesar que está acusado de pederastia y violencia contra de su hija de 10 años y su esposa, no lo pusieron a disposición de la Fiscalía Especializada, ahí existe una denuncia sin avances desde el año 2019, hace unas horas se trató de llevar a la menor y golpeó a su madre.
Entrevistada por los medios de comunicación la señora Natali S.V. dijo llorando, “esto es muy doloroso para mí, nadie me hace caso, yo sólo quiero justicia para mi hija”, junto a ella caminaba la víctima de la violación de identidad reservada.
Apoyada por sus familiares, amigos y vecinos convocó a una reunión para realizar una marcha pacífica, un mensaje compartidor por las redes sociales citó a las personas a las 16:30 horas de este miércoles, madres con sus hijos, abuelas y jóvenes llegaron con prendas de color morado.
Comenzaron a caminar desde la tienda Neto de la calle Río Ebro y la avenida Río Tajo, avanzaron en orden seguidos por un patrullero motorizado de Tránsito y Vialidad, caminaron cerca de un kilómetro hasta el puente de la calle doctor Sánchez Tapia, en la entrada del fraccionamiento Los Torrentes.
Narró con lágrimas en los ojos que el pasado 25 de octubre del 2019 se enteró que su esposo abusaba de su hija, la propia niña le contó lo que su padre le hacía desde tiempo antes, pero había soportado sus bajezas y guardado silencio porque la tenía atemorizada.
“Mi hija me dijo que Eduardo amenazó que nos iban a matar a todos si decía algo”, entonces presentó la denuncia en la Fiscalía Especializada en Delitos contra las Mujeres y las Niñas, pero después de un tiempo de dar vueltas le aseguraron que no podían hacer nada más, y que tenía que esperar.
Ya han pasado más de dos años y ese expediente está rezagado, el personal de la Fiscalía General del Estado a cargo de Verónica Hernández Giadáns no ha hecho justicia, hasta ahora no hay orden de aprehensión contra el acusado que sigue libre impunemente.
Natali S. V. mencionó que la noche del pasado martes ella y su hija fueron atacadas de nuevo por el denunciado, cómo se encuentran separados pero todavía están casados, la señora acudió a su anterior domicilio conyugal, y le solicitó a Eduardo T. B. que le diera el dinero de la renta.
El hombre reaccionó agresivo y le pegó en la calle Río de La Plata de Lomas 4, por la fuerza se quiso llevar a la menor que iba con su mamá, pero a los gritos pidieron auxilio y lo detuvieron entre varios vecinos, enterados que él enfrentaba señalamientos legales.
Lo entregaron a elementos de una patrulla de la Policía Naval, se lo llevaron a sus instalaciones del Penalito en la colonia Playa Linda de esta ciudad, pero a las cuatro de la mañana lo dejaron libre a pesar de la acusación de violencia física a la mujer y a la menor.
Una vez más Natali comentó que los encargados de la Policía Naval argumentaron que “no podían proceder contra Eduardo T. B., ya que supuestamente habían sido violentados sus derechos individuales, porque fue arrestado por civiles, no por los patrulleros”.
Y entonces se preguntan los vecinos, amigos y familiares de la pequeña víctima, ¿y en dónde quedan sus derechos y los de su madre?, mientras en la manifestación pedían cárcel para el agresor, alzaban cartulinas con consignas de “Justicia, Las Niñas No Se Tocan”, “Eduardo T.B. Violador-Pederasta Exigimos Justicia”.
Otras pancartas mostraban demandas como “Sr. Gobernador y Alcaldesa Exigimos JUSTICIA, Paty Lobeira Exigimos Justicia, Que no Salga Impune, Que no te toque, No Al Abuso Sexual Infantil”, y así permanecieron por varios minutos en la calle doctor Sánchez Tapia y la avenida Texolo de Los Torrentes, sin bloqueos a los accesos y con el apoyo de la ciudadanía.
Entonces la pregunta es concreta ¿Cuánto tiempo más tienen que esperar esta madre y su hija para que se haga justicia?, el denunciado está prófugo por un mero detalle jurídico o burocrático hasta cierto punto irresponsable, el marido está considerado como peligroso, un generador de violencia y pesan sobre él graves señalamientos, el caso ha generado el repudio de la sociedad y una justificada preocupación, las tiene amenazadas de muerte y “No queremos más feminicidios”.
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