Cuitláhuac García mantiene a su titular de SEDESOL en Veracruz y es un ladrón

Guillermo Fernández Sánchez, secretario de SEDESOL, ahora negocios millonarios para sus hijos en la Riviera Maya y Cancun con el aval de Cuitlahuac

Nadie explica por qué Guillermo Fernández Sánchez, todavía titular de SEDESOL Veracruz sigue en el cargo, cuando se ha comprobado ser un ladrón, político gris, pésimo servidor público, con doble moral y es famoso por su vergonzoso lema de “Una familia vive con mil pesos al mes”. Fernández Sánchez tenía una estructura, la cual desapareció al evidenciarse las anomalías y actos de corrupción perpetrados por  Luz Elena Rangel, quien junto con colegas y amigos jubilados de CFE hacían un pésimo trabajo en esta secretaría.

No olvidar haber sido cesados de sus cargos de manera inmediata y  sin excepción alguna, por parte del mismo secretario y por órdenes del incompetente gobernador Cuitláhuac García, quien no se daba cuenta de los negocios en esta dependencia, pues la directora, subdirectores y jefes de departamentos, dejando un verdadero cochinero de corrupción y   daño patrimonial.

Cabe mencionar que  Luz Elena Rangel, desde que hizo su entrega-recepción  a la nueva directora, sólo recibe llamadas telefónicas y no se presenta físicamente a solventar sus pendientes. Huyó de Xalapa y  del estado de Veracruz, dejando  desorden, corrupción y daño patrimonial en esa dirección, cuando existen obras inconclusas, como en el contrato SEDESOL-DGMCV-ICTP-16/2019, que  es “Construcción de pisos firmes  en los municipios de Ixhuatlán de Madero, Benito Juárez ,Ilamatlán, Zontecomatlán, Tlachichilco, Texcatepec y Zacualpan” y contrato SEDESOL-DGMCV-ADJ-09/2019, que es “Construcción de pisos firmes  en los municipios Tempoal, Tantuyaca, Chontla, Ixcatepec, Chinampa de Goroztiza, Citlaltépetl, Tamalín, Tepetzintla y Chicontepec ” y también en el  SEDESOL-DGMCV-LP-13/2020 que es “Construcción de pisos firmes  en los municipios de Texcatepec, Tlachichilco y Zacualpan”,  mismos, faltan por realizar pisos firmes y en los contratos SEDESOL-DGMCV-LP-10/2020 que  es “Construcción de cuartos dormitorios   en los municipios Hidalgotitlán y Texistepec” y SEDESOL-DGMCV-LP-18/2020 que  es “Construcción de cuartos dormitorios   en los municipios Las Minas, Tonayán, Acajete y Tatatila”, los cuales,  faltaron por terminar y construir cuartos, provocando la molestia social por parte las familias afectadas al no cumplirles lo prometido y dejándolos peor de lo que estaban.

 Estas obras fueron pagadas al 100 por ciento y ordenadas por la Arq. Luz Elena Rangel, pues al haber recibo el moche a la firma del contrato, ella estaba comprometida y a disposición de esas constructoras que no concluyeron esos trabajos  y se llevaron el dinero. Ella es responsable del daño patrimonial y corrupción por la falta de esos trabajos,  pero además no conforme con eso, la flamante exdirectora condicionaba a algunas constructoras favoritas de ella  a reparar ese daño  a cambio de nueva obra en los siguientes años, siendo un claro acto de corrupción, abuso de poder y autoridad, por pedir moche para dar contratos, ocupando para esos arreglos a la dirección y las constructoras, al jefe de Supervisión de obra, el Ing. Barreda  y al Ing. Manuel Ramos,  para que concluyeran esos trabajos pendientes.

Cabe mencionar que Manuel Ramos, un empleado que sirve, es el operador de la exdirectora Luz Elena Rangel y ya controlaba para dar seguimiento a las empresas que colocaba la directora, para  presionarlas y terminar las obras o si les iba mal, les pedía moche con el fin de no hacerles recesión de contrato, ya que por su carácter y preferencia, se imponen algunos supervisores y los manipula para efectuar estos actos de corrupción y de daño patrimonial. Lo peor, que todavía no se hayan tomado medidas contra él y quizá se quedó para limpiar un poco el desorden que dejó la exdirectora y aun  lo siguen conservando.

No debemos olvidar que el daño patrimonial de toda la obra ya pagada y no está ejecutada, se anexa el convenio con CFE y ser la Dirección de Mejoramiento quien tiene como responsabilidad ese programa, pero no tiene un control de cómo se realizaban dichos trabajos, ni estimaciones, ni evidencia fotográfica, ni soporte. Tanto la exdirectora, como Guillermo Fernández Sánchez pagaban sin ver, porque ya estaban arreglados en la entrega de sobornos, al ser “conocidos” del jubilado de CFE y había que aprovechar la ocasión y el momento afectando a la población por no terminar estos trabajos al 100 por ciento.

Todo la anterior mencionado es del conocimiento y aprobación del actual secretario Guillermo Fernández, un servidor de doble moral, porque prefiere hacer negocios personales y no hacer el trabajo encomendado, pues protege  a Luz Elena Rangel por la relación sentimental  que tiene con terceras personas y así fue como ella pudo obtener el cargo de directora y ser cómplice de toda la corrupción y daño patrimonial  en SEDESOL Veracruz.

Guillermo Fernández solo ha visto el bienestar de su familia, pues se ha dirigido de manera corrupta, porque tiene al frente de la Jefatura de la Unidad de Transparencia a su nuera, quien no tiene una Licenciatura, como lo requiere el puesto y sólo tiene una carrera trunca de 2 semestres, para apoyar en las obligaciones de sus nietos.  Su hijo Luis Guillermo Fernández no ha cumplido  con la pensión en los últimos meses y como buen padre de familia, Fernández Sánchez apoya a sus hijos.

El  titular de SEDESOL Veracruz  no dice que en los últimos años apoya a sus hijos en sus proyectos personales, como a su hija,  quien está en Playa del Carmen,  una joven egresada de Ingeniería y la apoya en la compra y remodelación de un hotel en la misma zona de Playa del Carmen, con apoyo monetario de varios millones de pesos y también a su hijo Luis Guillermo Fernández Córdoba, lo apoyó para que adquiriera una agencia de renta de aviones privados en la  Rivera Maya, para así poder tener un patrimonio en un futuro y que no lo esté mermando en lo que resta de su vida de jubilación y retiro, ya que este hijo es incompetente en lo personal y profesional.

Los honestos y austeros resultaron ser ladrones, pues antes, Guillermo Fernández Sánchez era un simple jubilado de la CFE y ahora existen negocios de moches en obras inconclusas y el de sus hijos en la zona turística en Quintana Roo. Lo sabrá Cuitláhuac García o se ha convertido en cómplice de este secretario de SEDESOL, quien sólo ve su beneficio personal.

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