Por Inocencio Yáñez Vicencio.
CDMX, 25 de Mayo del 2022.- Al alejarse Hannah Arendt, del juicio de Carl Carl Marx, de que: Los filósofos se han limitado a interpretar el mundo de distintos modos; de lo que se trata es de transformarlo. Ella, según Fina Birulés, atribuye a la teoría política la tarea de indicarnos como comprender y apreciar la libertad en el mundo y no la de enseñarnos cómo cambiarlo. Cambiarlo es cosa de aquelloso que aman actuar concertadamente y no del solitario trabajo de los teóricos. Al tiempo que reconoce que la condición de la vida del espíritu es el retiro de la acción, de lo visible. Por eso cree que el pensamiento puro sólo se supera con un » retorno al mundo».
Hannah Arendt, que para algunos es una reaccionaria y para otros es una revolucionaria, sin duda, en lo que coincide la comunidad científica es considerarla de las mentes más lúcidas del siglo XX. No obstante conocer la filosofía como pocos, no gustaba que la vieran como tal sino como simple representante de la filosofía práctica. No comparto importantes puntos de vista suyos, pero en michos análisis es extraordinariamente esclarecedora. Vaciar la política de contenido social es a todas luces su gran debilidad.
Si ya Hobbes y con él los neocontractualistas habían observado que el hombre no es por naturelaza político, que cuando más es tendencialmente político, Hannah Arendt, sostiene que el Zoon Politikon de Aristóteles ha sido mal interpretado. Que el Estagirita habló siempre del hombre liberado de cargas de dominación y de necesidades para entrar en la Polis y pricipalmente a su centro, al Agora, para entrar en diálogo, discutir, acordar. Acción y discurso hacen la política. Identifica la política con la libertad. Policía y libertad son lo mismo. Esto la llevó a mostrar que la tesis marxista de sustituir el gobierno de los hombres por el gobieno de las cosas al finalizar la lucha de clases y que la administración reemplace a la política, da inexorablemente lugar a un gobierno despótico, donde la voz del tirano apaga la pluralidad de voces, sin las cuales no hay política.
Las teorías que vienen de Maquiavelo, Weber, Bobbio… que conciben la historia de la política como la historia de la las relaciones de mando y obediencia, las responsabiliza de los grandes problemas que sufren los Estados interna y externamente.
Combate prejucios que para ella han derivado en deslizamientos que ponen en riesgo a los pueblos, que atentan contra la misma política como medio de resolver pacíficamente los problemas comunes.
La teórica del totalitarismo concibe la política como un medio- fin para la mejor convivencia. Para ella es la política la que permite confrontar todos los puntos de vista. Según su visión la política no está casada con una ideología, por el contrario se hace politica cuando se construyen los espacios que permiten todas las formas de pensar, negándose la política cuando se trata de imponer un pensamiento único. Por eso es obligación de los políticos defender la politica, esto es, las condiciones y reglas para presentar, discutir y ponderar todos los puntos de vista que tengan que ver con los problemas comunes. Cuando los partidos se unen existiendo un desartollo normal de las reglas y mecanismos para la pluralidad social y la expresión de ideas, va en contra de la política porque pasa sobre la diversidad y anula artificialmente diferencias, pero no asi cuando están amenazada la normatividad para la pluralidad y la competencia.
El rescate de la politica pasa hoy por un profundo y amplio debate sobre lo que significa realmente la política y un combate frontal contra los prejuicios que se tienen sobre la política. Al menos que querramos que los modelos de nación se confronten violentamente, no nos queda de otra a todos los que creemos en la vía legal y pacífica para resolver nuestra diferencias que apostarle a la politica, que institucionaliza la lucha de contrarios y que partiendo de la diferencia nos permite construir acuerdos, sobre la base del reconocimiento y el respeto de la pluralidad.
Veo a un presidente y a su partido Morena, muy dispuesto a destruir la política, pero también veo a los partidos sin ideas y que hablan por hablar, sin ningún recato. No saben a dónde quieren llegar y si no saben eso, pues no saben nada.
Hay que sacar a la política de ese pantano que es la lucha del poder por el poder y reconstruir todos los espacios para discitir en la diversidad, haciendo de los espacios públicos, espacios políticos, considerando que no todos los espacios públicos son políticos. No a la contemplación. La política es acción y discurso. Hoy la libertad se encuentra en la pluralidad y la discusión de los problemas que nos son comunes.
Si Hannah Arendt, era muy modesta, siendo un monumento del pensamiento crítico, lo único que puedo decir, es que, con humildad, pero con pasión, como lo reclamaba, tenemos que luchar contra las distorsiones de la política y volverla un recurso viable para reencontrarnos todos los que queremos un gobierno, que gobierne para todos.
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