Paso de Ovejas, Ver.- El camino a la última morada de Rosa Isela fue un martirio de más de una hora, pues su familia sigue sin explicarse el porqué de su artero y cobarde crimen.
Pasadas las 4 de la tarde los familiares de Rosa Isela llevaron su ataúd desde El Predio 4 en el municipio de Veracruz, hasta el panteón de Tierra Colorada localidad perteneciente al municipio de Paso de Ovejas.
Familiares y amigos aún no daban crédito a lo sucedido con la joven de apenas 19 años y que se encontraba en el último mes de gestación, la cual tenía previsto dar a luz el 17 de diciembre.
La joven desaparecida el pasado 30 de noviembre cuándo acudió a recibir una donación de ropa para su criatura, se convirtió en un número más de las lamentables estadísticas que mantienen a Veracruz en los primeros lugares de feminicidios de la República Mexicana.
Por obvias razones la familia se negó a dar una entrevista en campo santo; sin embargo, no dejaban de exigir justicia para los criminales que privaron de la vida a la joven de 19 años y quién se encontraba sumamente ilusionada de ser madre por primera vez.
En el sepelio solo se escucharon gritos y llantos de dolor. La madre, la hermana y las tías, no lograban disimular su enorme tristeza y desconsuelo pues la chica jamás le hizo daño a nadie y su único error, fue confiar en quien le ofreció ropa regalada para su bebe, pues ella de condición muy humilde, no tenía todavía prendas para su pequeñita. Su esposo albañil, trabajaba duro para apoyar en el alumbramiento, estaban ahorrando para el parto, pero no tenían todavía lo mas indispensable para la pequeña. Jamás imaginó que la muerte le esperaba al confiar en alguien a través de la red social facebook que le ofreció regalarle ropa para su niña.
Es la misma historia de Viridiana Moreno a quien por red social la citaron en el hotel Bienvenido de Cardel para ofrecerle un trabajo y encontró la muerte.
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