Severo daño a la credibilidad de UNAM y la SCJN plagio de Yazmin Esquivel/Opinión

Un golpe muy duro el escándalo de la magistrada que compro su tesis y ahora aspira a ser la máxima representante de la SCJN
- en Foro libre

Por Juan Antonio Valencia/ Opinión 

Tal pareciera que el movimiento de “La cuarta transformación” que impulsa Andrés Manuel López Obrador, en donde la tesis es “No robar, No engañar, No traicionar”, no tiene ningún efecto. Al menos en el grupo selecto de personas de su confianza.

El más grande escándalo de corrupción, viene a sumarse a una cadena interminable de vicios y actos de imprecisiones a nivel internacional y corrupción de la persona que hoy presume gobernar al país.

Una investigación del periodista crítico literario y escritor, Guillermo Sheridan Prieto, puso al descubierto que la tesis con la que se tituló la Ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Yazmín Esquivel Mossa, fue plagiada.

Esquivel Mossa, es la Ministra propuesta por López Obrador para ocupar la presidencia de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con la intención de que todas sus propuestas sean avaladas por la SCJN.

De momento esa propuesta ya fue derribada por “intelectuales orgánicos”, como los clasifica López Obrador. Pero el escándalo no termina ahí. En el refuego descubren que la directora de tesis y asesora de Facultad de Estudios Superiores Aragón de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Martha Rodríguez Ortiz, quien “asesoró” a la ahora Ministra Yazmín Esquivel, no solo le vendió la tesis a la Ministra, sino que de las 500 tesis en la que ha tenido relación directa en la compra-venta; ocho han sido comprobadas como plagios, entre ellas la del Fiscal Alejandro Gertz Manero.

Yasmín Esquivel Mossa en su ambición por ser presidenta del la SCJN se lleva entre las patas a la UNAM que pena

El escándalo de corrupción a la más alta escuela, que daña seriamente la imagen de la UNAM, hizo que esta institución se deslindara, de una aclaración pública que hizo la asesora, Martha Rodríguez Ortiz, al portal Latinus, como derecho de réplica, en donde al estilo de López Obrador, desmiente la investigación de Sheridan Prieto y la declara completamente falsa, pero sin poder demostrar documentalmente la falsedad.

No obstante investigadores de la UNAM, consideran que no es necesario aplicar métodos de Software para comparar las dos tesis, pues el burdo plagio cometido por la asesora Rodríguez Ortiz y Esquivel Mossa, es más que elocuente, al no cambiar más que el nombre de la pasante.

El escándalo que jurídicamente podría ser constitutivo de delito como falsificación y uso de documentos falsos, cometidos por la Ministra de la Suprema Corte de la Nación, Yazmín Esquivel Mossa y la académica de la UNAM, Martha Rodríguez Ortiz, deben traer como consecuencias, el despido de Rodríguez Ortiz y la renuncia de la Ministra Yazmín Esquivel.

Para no entrar en controversias, la SCJN también se deslindó del escándalo provocado por la Ministra.

El asunto no termina en una denuncia y valiosa investigación periodística, pues artículo 95 Constitucional, dice que “Para ser electo ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se necesita: I. – “Ser ciudadano mexicano por nacimiento, en pleno ejercicio de sus derechos políticos y civiles” pero en su fracción IV dice que deben de “Gozar de buena reputación y no haber sido condenado por delito que amerite pena corporal de más de un año de prisión; pero si se tratare de robo, fraude, falsificación, abuso de confianza y otro que lastime seriamente la buena fama en el concepto público, inhabilitará para el cargo, cualquiera que haya sido la pena”.

Si bien es cierto que la Ministra Yazmín Esquivel Mossa no ha sido juzgada y no registra ninguna pena corporal, no menos cierto es, que debe renunciar al cargo para ser investigada, juzgada e inhabilitada.

Con cualquiera que sea el resultado de este escándalo, ya no es aplicable para la todavía Ministra, el artículo 96 Constitucional, para ser considerada en la terna que el presidente de la república, enviaría al senado, con la encomienda de que ella sería la presidenta de la Suprema Corte de la Nación, para sustituir en el cargo a Arturo Zaldívar, quien dé inicio no acepto ampliar mandato, ni las condiciones de López Obrador.

 

Comentarios

¡Síguenos!

A %d blogueros les gusta esto: