Al pensar en agua purificada ya llega a nuestra mente de manera automática el plástico pues lo más común es que el agua se comercialice en presentaciones de botellas y garrafones de este material.
Sin embargo, no es tan común pensar que exista plástico dentro del agua que bebes y también con la que cocinas, lamentablemente, esta es una realidad cada vez más frecuente.
Los contenedores de plástico se han convertido también en un problema grave para la ecología del mundo, la más famosa prueba de esto es la isla de plástico que flota en el Pacífico con una extensión de 1,6 millones de km cuadrados, casi tres veces el tamaño de Francia.
Esta enorme masa de contaminantes plásticos ha afectado desde hace muchos años los mares y las especies marinas en ella pues confunden partículas de plástico con alimento y lo ingieren.
Por eso es importante saber cómo reducir el uso de plástico en tu día a día de manera que no afecte a tus actividades normales pero que al mismo tiempo sea significativo para el medio ambiente.
Como dejar de consumir plásticos
Los plásticos desde mediados del siglo XX se convirtieron en el mejor amigo de la industria, de hecho, en su momento de mayor popularidad las bolsas de plástico se presentaron como una alternativa amigable con el medio ambiente para dejar de utilizar empaques de tela.
Actualmente sabemos que esto no era cierto, por eso las regulaciones de leyes de varios países han prohibido el uso y distribución de bolsas de plástico.
También desde la iniciativa ciudadana muchas personas han decidido dejar de utilizar bolsas de plástico y llevar sus bolsas reutilizables al supermercado.
El reciclaje es también una buena alternativa para lograr que menos plásticos lleguen al medio ambiente y pueden procesarse por la industria de manera sencilla.
Para garantizar que los empaques de plástico sean correctamente reciclados es necesario separarlos y también limpiar su contenido, es decir, no dejarle dentro restos de comida o bebidas.
Con estas acciones, si bien es cierto que no se elimina completamente el uso de plásticos, si disminuirás tu huella de plástico considerablemente.
Plástico en el agua potable
El agua potable ha pasado por un proceso de potabilización que elimina contaminantes, pero no está exento de contraer otros contaminantes durante su transportación.
Los micro plásticos se han encontrado en el agua potable, estos no son visibles a simple vista pues tienen tamaños milimétricos, pero pueden representar en el mediano y largo plazo un problema para la salud de las personas.
Por esta razón se han desarrollado purificadores de agua con filtros con una alta porosidad que retiene sedimentos, incluidos los micro plásticos.
Una de las formas de dejar de consumir plásticos es también con un purificador, este se instala debajo de la tarja de la cocina, en el suministro de agua potable y con salida hacia el grifo.
Con un purificador puedes dejar de consumir agua pura en botellas y garrafones de plástico, además librarás a tu cocina de un antiestético garrafón de 20 litros.
Puedes conocer la calidad del agua potable de tu hogar solo ingresando tu código postal en la página de bebbia, también conocer los diferentes tipos de purificadores disponibles directamente en https://bebbia.com/planes.
Desde purificadores de una sola etapa hasta los más especializados como el de ósmosis inversa que tiene la capacidad de eliminar incluso presencia de micro plásticos del agua potable, todos ellos con certificación emitida por COFEPRIS.
Los purificadores de agua se presentan como una alternativa moderna y también ecológicamente responsable ya que su mantenimiento es mínimo, solo cada 6 meses hay que cambiar los filtros y tendrás agua segura por 6 meses más.
Esto, comparado con la cantidad de contaminantes plásticos que se generarían con botellas de plástico representa una reducción descomunal.
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