TAG Heuer es una marca suiza que se dedica a la fabricación de relojes, especialmente relojes deportivos y también cronógrafos. Es una marca sumamente vinculada al mundo del automovilismo. Más adelante se incorporaron otros accesorios como teléfonos inteligentes que vienen manufacturados por otras compañías o lentes de sol.
TAG Heuer se caracteriza por sus modelos audaces y vanguardistas, creando modelos de relojes que destacan por su precisión, marcando toda la historia de la relojería a nivel mundial. Si quieres comprar un reloj de esta marca, te contamos primero un poco acerca de su historia y cómo llegó a ser lo que es hoy en día.
Descubre la historia y el legado de TAG Heuer, la compañía de relojes que tiene más de 160 años en el mercado, innovando tecnológicamente.
TAG Heuer: un poco de historia
La compañía TAG Heuer se fundó en el año 1860 por Edouard Heuer, en Suiza. Patentaron el primer cronógrafo que se fabricó bajo la marca en el año 1882, y en el año 1887 el señor Heuer patentó el “piñón oscilante”, que se sigue utilizando hoy en día en cronógrafos que son mecánicos.
Continuando con las primeras grandes creaciones de TAG Heuer, en el año 1911, pone la firma en el primer cronógrafo de a bordo que se utilizó en automóviles y también en aviación, que se llamó “Time of Trip”. Tres años después, en 1914, salió al mercado el primer cronógrafo de pulsera, y dos años después, en 1916, salió el Micrograph, que fue el primer cronógrafo para medir centésimas de segundos.
Entre otros de sus más famosos lanzamientos, podemos mencionar el “Autavia” lanzado en el año 1932, que fue el primer cronógrafo apto tanto para automóviles como para aviación, y que luego sería una línea muy importante de la marca. Otro gran lanzamiento fue el “Flieger”, un cronógrafo fabricado entre los años 1925 y 1940 para los pilotos de Luftwaffe, y después de la guerra sacaron modelos de cronógrafos que venían con su calendario de fecha triple: día, mes y año.
TAG Heuer en la década del ‘60
Un poco antes de entrar a la década del ‘60, más precisamente en el año 1958, la marca lanzó una serie de relojes de tablero, que se produjeron por aproximadamente dos décadas. También lanzaron distintos instrumentos que se utilizaban para cronometrar esquí, algunas pruebas de motor como Fórmula 1, entre otras pruebas deportivas.
Cuando John Glenn se convirtió en ser el tercer astronauta de procedencia norteamericana y el primero en ponerse en órbita con la cápsula Mercury, llevaba en su muñeca un cronógrafo de TAG Heuer, pegado con cintas. Esto sucedió en el año 1962, y ese reloj se conserva actualmente en el Museo del Aire y el Espacio que se encuentra ubicado en San Diego.
Durante esta década, los relojes TAG Heuer fueron sumamente populares, principalmente entre corredores de automóvil, desde los más profesionales hasta los más amateurs. En este momento, la marca era líder en la producción de equipos de medición del tiempo y cronógrafos, y entre 1962 y 1963 lanzaron el modelo Autavia y el modelo Carrera, respectivamente.
Principios de la década del ‘70
Casi ingresando a la década del ‘70, en 1969, TAG Heuer se asoció con Buren, Breitling y Dubois-Dépraz, para fabricar en secreto el Calibre 11, que era un calibre automático que, junto con “El Primero”, creado por Zenith, sería el primer calibre cronógrafo de carga automática. Este fue montado en las líneas Mónaco, Autavia y Carrera.
En el año 1971, Steve McQueen usó un modelo Mónaco azul en la película Le Mans, por eso es que actualmente se lo conoce a ese modelo como el Mónaco McQueen. En la misma época, Jo Siffert, estrella de Fórmula 1, utilizaba un Autavia en blanco.
Y llegando a la mitad de la década de los ‘70, la marca lanzó un cronógrafo digital, llamado Chronosplit, y también salieron modelos que venían con mecanismos Valjoux 7750 y también Alemania 5100.
Década del ‘80 en adelante
En el año 1985, la marca Heuer fue comprada por TAG, que significa Techniques d’Advant Garde. Esta compañía está conformada por fabricantes de componentes de alta innovación técnica, como son los turbocompresores cerámicos para los monoplazas de la Fórmula 1. Desde ahí, la compañía se rebautizó con el nombre de TAG Heuer.
Ya finalizando la década del ‘90, en 1999, el 50% de las acciones de TAG Heuer se vendieron a LVMH, un grupo dedicado a los artículos de lujo. Durante dos años, desde el 2016 hasta el año 2018, TAG Heuer fue auspiciante del equipo Red Bull Racing en Fórmula 1, nombrando a los modelos de motores que fabricaba Renault. Un contrato que terminó por romperse cuando se anunció que la marca Honda iba a ser el motorista de la siguiente temporada.
Los Juegos Olímpicos de Ámsterdam, de París y de Amberes, son cronometrados con distintos instrumentos de la marca.
Modelos emblemáticos de la marca
Entre los años 1985 y 2004, la marca se caracterizó por la modernidad y tuvo su proceso de renovación. Cuando la marca pasa a ser conocida como TAG Heuer, deja de ser conocida por sus cronógrafos mecánicos, para transformarse en una reconocida fabricante de relojes del siglo XXI. Los modelos que desarrollaron en la década del ‘80 pasaron a ser la base del catálogo de la marca, hasta los diseños que tienen en la actualidad.
Años 1985 – La Serie 2000
A principios de la década del ‘80, Heuer anunció seis características que iban a ser clave para describir la nueva serie de relojes para buceo. Estas características eran: resistencia de hasta 200 m de profundidad en el agua; presencia de un bisel unidireccional; una corona enroscada y cierre doble en la parte del brazalete de acero. Para una mayor legibilidad tenía cristales de zafiro y algunas marcas luminosas. Todas características que se mantienen actualmente en el modelo Aquaracer.
Año 1986 – El Fórmula 1
El modelo de reloj TAG Heuer Fórmula 1 fue diseñado manteniendo los característicos colores brillantes de la marca, su caja de plástico, los cuarzos y el packaging pop. También alcanzaba los 200 metros debajo del agua.
Año 1987 – Elegancia y deporte
En esta época, la marca TAG Heuer reformó algunos de sus relojes de buceo tradicionales para que puedan usarse no sólo con un traje de buceo sino también con un smoking. Esta serie de relojes recibió el nombre “Link”, en el año 1999.
Año 1991 – Nuevas campañas y nuevos relojes
En este año, la compañía comenzó a sacar campañas publicitarias que fueron galardonadas, para presentar las nuevas gamas de relojes. Una campaña fue llamada “Don’t Crack Under Pressure”, que salió entre 1991 y 1994 rindiendo homenaje a Michael Schumacher y Ayrton Senna.
Año 1996 – Primeras reediciones
En la década del ‘90, la marca lanzó reeditados algunos modelos de cronógrafos clásicos que se habían hecho famosos en la década del ‘60. En 1996 salió la reedición del TAG Heuer Carrera, en 1998 la reedición del Mónaco.
Año 1999 – LVMH
Y llegamos al año en que la marca comienza a tener diseños de lujo de LVMH. Jack Heuer, que tuvo que vender la empresa de su legado familiar en el año 1982, pudo regresar en el año 2001 como presidente honorífico, compartiendo el legado de la marca por todo el mundo.
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