Xalapa, Ver.- El cierre de las estancias infantiles en México ha desencadenado repercusiones negativas en el ámbito laboral de los padres de familia y en el desarrollo de las niñas y niños del país, señaló la diputada local Nora Lagunes Jauregui, quien recordó que desde hace 5 años fue cancelado este programa por el actual gobierno.
Señaló que, desde su inicio, el 11 de enero de 2007, el programa de guarderías y estancias infantiles se propuso para apoyar a las madres trabajadoras con la finalidad de disminuir la vulnerabilidad de los hogares donde el cuidado de los menores recaía en ellas o en los padres solos.
Mencionó que a pesar de que el programa actualmente otorga un subsidio directo a las madres de mil 600 pesos bimestrales, lo que equivale a 800 pesos al mes, este monto está lejos de cubrir los costos reales de una guardería.
«En Veracruz, por ejemplo, el costo mensual de una guardería es de 2 mil pesos para maternal y 3 mil pesos para kínder, no les alcanza lo que les dan para cubrir una mensualidad en la estancia infantil de sus hijos”, comentó.
Resaltó que a pesar de que legalmente los trabajadores deben tener acceso a esta prestación, muchos no la reciben.
Precisó que el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (CONEVAL), hasta el 2022 solo el 3 por ciento de los menores de 0 a 6 años eran atendidos en guarderías públicas, el 1 por ciento en guarderías privadas y el 96 por ciento restante eran cuidados por algún familiar.
“Esto pone en evidencia la importancia de las estancias infantiles como opción para las familias que necesitan apoyo en el cuidado de sus hijos mientras trabajan”, dijo.
La diputada Lagunes Jáuregui, insistió en que el cierre de las estancias infantiles ha sido un golpe duro porque no solo afecta el ámbito laboral de los padres, sino que también tiene consecuencias negativas en el desarrollo de los niños porque estos centros no solo brindaban cuidado, sino también estimulación temprana y actividades educativas que contribuían al desarrollo del lenguaje, habilidades sociales y motrices de los menores.
“Es importante recordar que el programa de Estancias Infantiles no solo proporcionaba cuidado a los niños, sino que también otorgaba a las madres un promedio de 36 horas libres para poder realizar actividades económicas que les proporcionaban ingresos adicionales, además el cierre de estos centros no solo priva a los menores de un entorno propicio para su desarrollo, sino que también afecta negativamente la estabilidad económica de las familias”, explicó.
De acuerdo a la diputada, el cierre de las estancias representa un retroceso en materia de bienestar social y desarrollo infantil, por lo que es fundamental que se reconozca su importancia y tomen las medidas para garantizar el acceso equitativo de todos los niños a servicios de calidad que promuevan el desarrollo integral.
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