Protestan proveedores de la extinta Ingeniería Control e Instrumentación que exigen su pago

Después de meses de espera de alguna respuesta con respecto a la fecha de pago, decenas de proveedores se manifestaron. (Foto Notiver).

Por Víctor Pineda/NOTIVER

Después de meses de espera de alguna respuesta con respecto a la fecha de pago, decenas de proveedores de la desparecida empresa Ingeniería Control e Instrumentación, se manifestaron este martes en las instalaciones conocidas como «El Cedral» de Medellín de Bravo.

Y es que, en ese lugar se prestaban los servicios y se realizaban las entregas de materiales para apoyar la producción de la mencionada empresa.

Desde el pasado mes de enero después de que por razones que no han sido comunicadas, los trabajos de la empresa Ingeniería Control e instrumentación, fueron suspendidos al igual que los pagos y la única respuesta en este sentido desde esa fecha es que se está en espera que sus clientes en este caso las empresas españolas TSK,  Powertecno e Ingemas México les paguen para que ellos les puedan pagar.

Ellos expresan que la producción fue para los proyectos de los ciclos combinados Mérida y Valladolid por órdenes de compra de la empresa Powertecno, para el ciclo combinado de Salamanca por órdenes de compra de la empresa Ingemas Mexico, lo cual solicitan que Comisión Federal de Electricidad intervenga para que TKS Powertecno asi como Ingemas Mexico, liquiden las facturas ya que si no lo hacen estarán dejando sin ingreso a más de 250 familias veracruzanas que trabajaron confiaron e invirtieron en estos proyectos como parte del desarrollo, pero al dia de hoy no han recibido el pago.

Dentro de las empresas que se manifestaron están comedores, transportistas, renta de maquinaria, Ferreterías, prestadores de servicios de seguridad, suministros de seguras industrial entre otros.

Los proveedores ven con preocupación el que estén sacando todos los materiales y estén dejando vacío los talleres porque aunque tienen ubicada su nueva sede cerca de la Tinaja; Veracruz para seguir con la presión de cobro.

Lo están interpretando como una negativa al diálogo y mucho más a que suceda el pago. (Fuente Notiver)

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