CDMX.- Lapoliticaonline.- A lo largo de ayer lunes el clima fue mutando en el entorno de la gobernadora Rocío Nahle, donde se pasó del optimismo por los triunfos de sus allegados en Veracruz, Xalapa y Coatzacalcos a una sensación de retroceso que comenzó con la derrota en Boca del Río y siguió con el resultado final de que Morena perdió 60 municipios y ahora gobierna 70 sobre un total de 212.
El cambio visual fue absoluto: Nahle pasó de estar dicharachera y sonriente el domingo por la mañana a tener un semblante de derrota ayer lunes por la noche.
«Yo no sé, yo aquí lo único que sí les puedo decir es que yo respeto, lo dije, respeto al pueblo veracruzano. Y si el pueblo decidió ir por un lado, o sea, así tiene que ser, así tiene que ser. Y cada partido va a asumir o no lo que le corresponda. De hecho, pues a veces se aprende más de los tropezones, porque se fortalece uno», dijo la gobernadora.
Rápidamente al interior del gabinete comenzaron los cruces de opiniones y los señalamientos hacia el esposo de la gobernadora, José Luis Peña, quien habría tenido un papel protagónico en municipios pequeños y medianos, donde se impusieron el PAN y MC.
Un caso que se menciona con insistencia es el del municipio de Alvarado, donde Peña intervino de lleno en el comando electoral y hasta opinó sobre la campaña visual de Morena que era encabezada por Hipólito Deschamps. «estábamos bien en las encuestas, 10 puntos arriba, pero metió mano el esposo de Rocío y perdimos contra el Verde», susurran en la entidad costera.
A Peña también le achacan lo sucedido en Poza Rica, el cuarto municipio de la entidad, donde la campaña arrancó con ventaja de Morena, pero al final el triunfo fue para MC.
El esposo de Nahle, por su parte, cree que el exgobernador Cuitláhuac García, incorporado en el gabinete federal, operó fuerte contra la mandataria estatal y que habría financiado varias campañas del PT e incluso del PRI.
Cuitláhuac, en tanto, ha deslizado en diversas reuniones en la CDMX que la operación contra Nahle proviene de Adán Augusto López Hernández, enemistado con Peña, por cierto, a partir de diversos avatares con proveedores en la fallida refinería de Dos Bocas, que era responsabilidad de Nahle en el sexenio anterior.
Comparte esto:
Los culpan por no ser unos cerdos metiendo la mano en las elecciones como López Obrador, Sheinbaum, el nini poco seso de Cuitláhuac García y demás fauna nociva morenista.