Los diablos andan sueltos

Alfonso Romo desde la Primer Oficina de la Presidencia le da jugosos negocios a los Salinas sus amigos, y otros empresarios, hasta compadres de AMLO

PRIMERA PARTE 

No cabe duda, la democracia institucionalizada, en sus 90 años, con altas y bajas, mas bajas que altas,  del PRI y los doce años trágicos del PAN, ha formado a generaciones en la disciplina del silencio, la sumisión, alcahuetería, complicidad,  todo por las buenas, con premios en posiciones en secretarías o legislaturas, contratos, permisos y chances de abrir o quitar bosques, ríos, montañas, tierras ejidales, costas, islas, especies marinas o terrestres.

Todo se podía en esa democracia, al tipo de Carlos Hank González “ vivir fuera del presupuesto es un error” o aquella lapidaria “ político pobre es un pobre político”.

El prócer de la ultraderecha, Mario Vargas Llosa, buen escritor por cierto, político reaccionario, se fue “directo y a la cabeza”: México es una dictadura perfecta. Esa perfección celosamente resguardada por décadas, para bien de algunos y mal de muchos, tantos que, ya hoy, suman mas de 65 millones de pobres.

Joseph  E. Stiglitz, premio nobel de economía en el 2001, fue tajante, en la repartición de la riqueza  en Estados Unidos: “el 1% de la población mundial disfruta de las mejores viviendas, la mejor educación, los mejores médicos y el mejor nivel de vida, pero hay una cosa que el dinero no puede comprar: la comprensión de que su destino está ligado a cómo vive el otro 99 por ciento. A lo largo de la historia  esto es algo que esa minoría solo ha logrado entender…cuando ya será demasiado tarde” (El Precio de la desigualdad).

Lo sucedido el primero de julio, con una apabullante mayoría de mas de 30 millones de votos a favor de un cambio de régimen, vaticinó las reacciones de la casta política despojada del poder real, de la sumisión de legisladores “levanta dedos”, las derramas económicas a la sociedad civil, esa organizada a costa y con la venía del poder, para compartir los recursos públicos a cambio de gracias y canonjías cuasi eclesiásticas. Eso sucedió con Vamos México de la Martha del Fox mandilón. En la administración de Felipe Calderón (PAN), para dejar impune a la prima política, junto al gobernador Eduardo Bours (PRI), responsables, quiérase a no del ¿asesinato?  de 49 niños en la guardería  ABC.

En los primeros cinco años del sexenio de Enrique Peña Nieto, Organizaciones de la Sociedad Civil (OSC) recibieron más de 37 mil 477 millones de pesos en “apoyos” y “estímulos económicos”. Dicha cantidad, que suministraron diversas dependencias federales, representó 44% más de los recursos que se destinaron para el mismo fin durante la administración del presidente Felipe Calderón Hinojosa. En ese sexenio se distribuyeron 20 mil 817 millones de pesos, según se desprende de los informes anuales de la Cuenta Pública en materia de las acciones de fomento, apoyo y estímulos otorgados por la administración federal a las OSC. (Proceso)

También con los mas de mil millones de pesos, a la agrupación “benéfica” de la frustrada aspirante presidencial,  Josefina Vázquez Mota, apoyos que se darían directamente a supuestamente migrantes y no llegó.

El escandaloso caso de Televisa y las donaciones  para dar servicios que corresponden al gobierno, “El Patronato del Teletón está controlado por los hombres más ricos y poderosos del país, incluidos Emilio Azcárraga, presidente de Televisa, y Carlos Slim, presidente de Telmex, Telcel y Carso. Si ellos  quieren ayudar a los niños discapacitados, que lo hagan con su propia fortuna,  sin evadir impuestos o desperdiciar dinero en costosos circos mediáticos. Más de 65 millones de pobres no tienen suficientes ingresos para satisfacer sus necesidades básicas. La situación de los niños discapacitados o con cáncer es particularmente escandalosa ya que el colapso de los servicios públicos durante la larga noche neoliberal los ha dejado en un estado de total abandono. Dejemos de alimentar a los monstruos que generan nuestra desgracia y trabajemos juntos para lograr un nuevo régimen donde el Estado cumpla con sus obligaciones”. (PROCESO).

O tantas y tantas agrupaciones, organizaciones, sociedades o fundaciones, privadas, religiosas o de algún familiar político que fueron receptoras de cientos de miles de millones de pesos para la beneficencia pública a los pobres, discapacitados, enfermos y secuestrados, violados o asesinados. Muchas de ellas, no todas por supuesto, pero muchas fueron apoyadas en los treinta y seis años recientes, en los sexenios de la evaporación del gasto público, la creación de fideicomisos y empresas fantasma, y todas las chuladas evasoras de impuestos y receptoras de presupuesto, como el caso de las estancias infantiles que desviaron mas de mil millones de esos y recibían a cerca de mil niños “inexistentes”.

Esto sumado a las facturas dobles, los diezmos de constructores por obras no licitadas, o moches, cochupos, toques, mordidas a medios de comunicación, periodistas, analistas políticos, conductores de radio y televisión que disfrazaban la realidad “real” para manipular conciencias por los dichos de cada presidente de la republica en el periodo neoliberal: Miguel de la Madrid, “De Frente – Combatir la corrupción”. Carlos Salinas: Solidaridad, Ernesto Zedillo, bienestar apara la familia. Vicente Fox, El gobierno del cambio. Felipe Calderón, el presidente del empleo y Enrique Peña Nieto, Mi compromiso es contigo.

Slogans,  que ni se combatió la corrupción, ni se solidarizaron con los pobres, si se deterioró como nunca el bienestar familiar, gobiernos que nunca cambiaron y su compromiso fue con ellos, ni de broma con todos los demás: el pueblo.

El primero de julio, ese pueblo, desatendido, este país devastado, ejerció la democracia con su voto, no por un cambio de gobierno, sino por un cambio de régimen. Por transformar a esta Nación como se hizo en la Independencia, contra el yugo imperial de España, en la Reforma contra la alianza de conservadores y el clero, y la Revolución contra todos, conservadores, terratenientes, trasnacionales, dictadores, empresarios voraces. Estos tres movimientos se levantaron en armas para frenar el saqueo e impedir la injusticia pero este Este primero de julio se votó por un cambio que aspira a democratizar la vida pública, la transparencia del manejo de los recursos y sobre todo para apagar la insaciable sed de corrupción, impunidad y simulación. México vivirá en democracia plena, al menos a eso se aspira pero Los Diablos Andan Sueltos:

Ángel Álvaro Peña, de Políticos  al Desnudo, en su columna Impunidad de cuello blanco, lo sintetiza así: “Ya fue tiempo suficiente para exhibir a los funcionarios públicos culpables de corrupción, ahora es tiempo de sanciones ejemplares”.

Ellos ex funcionarios, gobernadores, legisladores, clérigos pederastas, empresarios golosos)  en la cárcel. Porque en muchos casos de ilícitos en los gobiernos de los estados están ligados directamente a complicidades en niveles superiores, lo que quiere decir que, por lo menos, secretarios de Estado y  hasta Presidentes de la República,   están involucrados y ser llamados por la justicia.

Lo  cantó Julio Solórzano: Es Hora de decir Basta, para  exigir  JUSTICIA SIN VENGANZA, ahí va la segunda parte.

Comentarios

  1. Te felicito, muy buen artículo.
    Los nefastos políticos siguen saqueando nuestra patria, y no se ve luz al fondo del túnel

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